La empresa confirmó que no tiene azúcar para elaborar sus gaseosas; continuará con la producción de las bebidas que no la requieren.
La empresa Coca-Cola confirmó hoy que interrumpirá la producción en Venezuela hasta que se restablezca el despacho de azúcar, en medio la fuerte crisis de desabastecimiento.
En medio de una crisis total en el país gobernado por el chavista Nicolás Maduro que provoca horas de cola en supermercados para conseguir los productos básicos, escasez de medicamentos y de la crisis energética que paró la producción nacional y también la rutina diaria de los trabajadores, la empresa que fabrica bebidas anunció que no podrá seguir haciendo su gaseosa más famosa.
Según un comunicado de la compañía estadounidense, "se han agotado los inventarios de azúcar refinada de uso industrial existentes en plantas, tal y como se pudo constatar durante un recorrido realizado por representantes de los trabajadores y la empresa".
Por esta razón, se interrumpieron de manera temporal las líneas de bebidas que se elaboran con esta materia prima. Sin embargo, seguirán produciéndose las bebidas que no requieren de azúcar, como las aguas y Coca-Cola Light, aclara la compañía.
De todos modos, las autoridades se mostraron optimistas e indicaron que "en el corto plazo" se contempla la recuperación de los inventarios de azúcar del país.
"Seguimos avanzando conjuntamente con proveedores y autoridades competentes en la búsqueda de alternativas para solventar esta coyuntura", aclara la compañía.
Para conservar las fuentes de empleo, "el Sistema Coca-Cola ha ofrecido a sus trabajadores una «compensación solidaria», superior a los términos de ley, con lo cual reitera el compromiso que la compañía mantiene a largo plazo con Venezuela".
La parálisis de la planta de Coca-Cola se suma a la lista de empresas complicadas por la situación económica en el país.
Ante este panorama, y con una notoria baja en su apoyo popular, cada día son más los venezolanos que quieren que el mandatario Nicolás Maduro abandone el poder, por lo que apoyan a la oposición para la creación de un referéndum sobre su gestión.