El jugador tuvo una mala racha jugando a League of Legends. Debió ser asistido por los cortes que sufrió.
La ira puede ser una amiga muy tentadora pero demasiado mala para los jugadores, que pueden perder los nervios debido a la misma perdiendo precisión en sus movimientos o teniendo reacciones tan desafortunadas como la que contaremos a continuación.
La historia que aunque parezca sacada de una película de ficción es totalmente real. Ocurrió en un ciber de Lanzhou, China, en el que cuatro jugadores de League of Legends decidieron aliarse para buscar partidas juntos e intentar sacar provecho de la gran comunicación que le podía dar su cercanía para ganar de forma más fácil sus partidas con rango en el MOBA de Riot.
Sin embargo, la cosa no fue tan bien como esperaban y la falta de pericia de uno de los cuatro jugadores y la ira y frustración de otro de ellos provocaron que este último, fruto de la impotencia y de la rabia de perder cuatro partidas seguidas, decidió hacer pagar los platos rotos a la pantalla de la computadora del ciber propinándole un cabezazo con tanta fuerza que hizo que atravesase la pantalla con su cabeza.
Su desgraciada acción fruto de esos sentimientos que no pudo reprimir, le han costado unos cuantos cortes en la cabeza y los responsables del local tuvieron que llamar al servicio de emergencias donde han tenido que atender al jugador, además de costarle una buena cantidad de dinero para pagar ese monitor que ha destrozado y que ha pasado a mejor vida gracias a su prominente cabezazo que no sería capaz de propinar ni el mismísimo Sergio Ramos.