Según se pudo conocer, en Argentina se han dado tres casos similares al del pequeño Mauro López Banegas, dos de ellos fatales.
En el año 2003, durante un congreso médico argentino se dio el debate sobre esta sustancia ante otro caso de aspiración accidental de purpurina.
Los doctores Farías, S.; Olivieri, M.; Quarenghi, del Hospital del Niño Jesús de San Miguel de Tucumán elaboraron un documento al respecto e informaron a modo de conclusión los siguiente:
“Que ante, la presentación de un caso clínico de un niño que accidentalmente aspira e ingiere purpurina (polvo volátil compuesto de Zn y Cu).
Entre los considerandos, los especialistas destacaron en el documento:
1) Hacer conocer el peligro potencial de este producto, de tan fácil acceso en los hogares, por su uso en actividades manuales e incluso en cosmética.
2) Prevenir a los pediatras de las posibles aspiraciones de purpurina en los niños de edad preescolar y escolar para su pronta intervención.
3) Todo paciente con aspiración de esta sustancia requiere internación urgente para actuar sin demora, debido a la patología que produce a nivel pulmonar con evolución irreparable del distress.
4) Advertir a la población en general sobre los peligros de esta sustancia, previniendo males mayores.
5) Incorporarlo dentro de los productos peligrosos para que sea convenientemente evaluado y titulado dentro del área industrial.