El régimen que preside Bashar al Assad ha realizado casi 3.000 ataques aéros desde finales de octubre hasta el pasado 10 de diciembre, según las estimaciones del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, una organización con sede en Reino Unido y con una amplia red de informadores sobre el terreno.
Desde el 20 de octubre hasta el 10 de diciembre, los aviones de combate y los helicópteros del régimen han llevado a cabo 2.973 ataques. Los cazabombarderos de la Fuerza Aérea siria han realizado 1.611 ataques en Damasco, Deraa, Alepo, Idlib, Al Quneitra, Homs, Hama, Deir el Zor, Latakia y Al Hasaká.
Los helicópteros han lanzado en este periodo 1.362 barriles explosivos en Damasco, Deraa, Alepo, Idlib, Homs, Hama, Al Hasaká y Latakia. Los ataques han acabado con la vida de 735 civiles, de los cuales 155 eran niños y 133 eran mujeres, y han dejado unos 2.800 heridos, además de causar numerosos daños materiales y decenas de miles de personas desplazadas.
El Observatorio ha hecho un llamamiento a los países que "tienen un impacto significativo en la comunidad internacional y aseguran defender los Derechos Humanos" para que "trabajen con más ahínco para detener los crímenes de guerra y los crímenes contra la humanidad cometidos a diario contra el pueblo sirio y para que remitan los hechos al Tribunal Penal Internacional" o creen un tribunal especial sobre Siria, "en caso de que Rusia y China continúen usando su derecho de veto en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
"Es una vergüenza que aquellos que dicen defender los Derechos Humanos solo escriban y publiquen declaraciones para condenar estos delitos", ha afirmado.
Por último, el Observatorio ha reiterado su exigencia de que el régimen de Damasco sea incorporado al "libro Guinness de los Récords" por realizar "unos 3.000 ataques aéreos en 60 días y por matar y herir a unos 3.500 civiles" en este periodo.