El gobernador del Chaco lamentó la muerte de Oscar Sánchez, pidió que no se utilice en forma proselitista. Admitió que en los últimos cuatro años murieron 1800 niños en su provincia.
El gobernador del Chaco, Jorge Capitanich, aseguró que la muerte del chico qom Oscar Sánchez le "duele profundamente" y pidió evitar una utilización proselitista del hecho, a la vez que destacó los logros de su gestión, pero admitió que en cuatro años murieron más de 1.800 niños por causas vinculadas a la pobreza.
Capitanich, al defender los avances que realizó su gestión, afirmó que el índice de pobreza en el Chaco cuando asumió, en 2007, "era equivalente al 43 por ciento" y "hoy el mejor índice es de 8 o 12,5 por ciento y el peor es del 16,7 por ciento".
El gobierno ya no publica datos de pobreza, pero según datos del INDEC, en el tercer trimestre de 2014 en la provincia había una tasa de desempleo de apenas el 2 por ciento y en Resistencia de sólo el 0,2 por ciento.
"Tomemos el peor, ese indicador permite visualizar que en ocho años hicimos una drástica reducción de la pobreza", acotó el gobernador. Luego, remarcó: "Efectivamente, hemos tenido que lamentar la muerte de 1.873 niños" en los últimos cuatro años, admitió Capitanich. "Es una cifra que nos duele", aseguró.
Pero "hemos podido evitar unas 3.000 muertes por las políticas de prevención y que antes se morían inevitablemente", remarcó en referencia a los 16 años de gobiernos radicales anteriores a su gestión.
De esta forma, sin nombrarla, Capitanich respondió a los dichos de la intendenta radical de Resistencia, Aída Ayala, quien el próximo 20 de septiembre competirá como candidata a gobernadora y ayer denunció que, durante los últimos cuatro años, fallecieron alrededor de 2000 niños en esta provincia por razones relacionadas con la falta de recursos económicos.
DOLOR EN EL CORAZÓN
La de Oscar Sánchez "es una muerte más que nos duele profundamente en el corazón", sostuvo el gobernador, durante un acto que realizó ayer para inaugurar obras en Resistencia, durante el cual pidió un minuto de silencio en memoria del niño aborigen fallecido.
Foto: Archivo
"No se puede utilizar una muerte como parte de una campaña proselitista para intentar enlodar una gestión", reprochó, y ratificó que el chico qom, de 14 años, había sido derivado al Hospital Pediátrico de Resistencia por "serios problemas neurológicos que afectaron sustancialmente su capacidad nutricional a través del tiempo".
Según Capitanich, "en los 12 años anteriores" a su administración, "casi 7.200 niños murieron por causas algunas evitables y otras no" y cuestionó a la UCR al aseverar que cuando asumió hace ocho años unos "800.000 chaqueños estaban subsumidos en la pobreza".
"En nuestra gestión, la mortalidad infantil se redujo de una manera abrupta, de casi 21 por mil a una proyección de casi 10 por mil", dijo el mandatario, para quien la mejora de este índice respondió a "obras de infraestructura, con inclusión escolar y alimentación digna a partir de la mayor capacidad de generación de empleo".
Su gobierno, enfatizó, encaró una "reparación histórica, no solamente de nuestras comunidades indígenas, sino también de nuestras comunidades criollas abandonadas y rurales". "Sentimos profundo dolor porque cuando nos hicimos cargo en 2007 nos entregaron una provincia destruida, desintegrada, con alto nivel de exclusión, con pobreza y marginalidad extrema", aseguró.
"Nadie puede utilizar una muerte. Tenemos que ser objetivos en el análisis y lamentar que esto ocurra", consideró el ex jefe de Gabinete de la Nación, para concluir lanzando una crítica a la principal fuerza de oposición: el radicalismo "tuvo la Gobernación del Chaco durante 16 años. No se puede resolver en ocho años problemas de toda una historia", manifestó.