Acreedores del asesor financiero se presentaron ante la fiscal que investiga el caso.
La fiscal Graciela Bugeiro, a cargo de la investigación, definió la situación financiera de Mariano Benedit como "comprometida". Ahora, los investigadores de la muerte buscan pistas en las deudas que tenía el financista para tratar de determinar los motivos que lo llevaron a quitarse la vida, si es que se confirma la principal hipótesis: que se trató de un suicidio.
"Si la hipótesis del suicidio, que es la más firme hasta el momento, se confirma, deberíamos descartar que Benedit haya sido inducido a tomar esa drástica decisión. Por eso en las próximas horas se buscarán pruebas en las deudas que tenía para saber si presionado por su situación financiera fue instigado a matarse", afirmó a LA NACION anoche un calificado detective de la Policía Federal.
El mismo informante contó que acreedores de Benedit se presentaron en la fiscalía de Bugeiro para informar sobre las deudas que tenía el asesor financiero, de 31 años, y que hacía 15 días había sido padre por primera vez.
"Debía cerca de 750.000 dólares", sostuvo un investigador del caso. Y agregó: "En las próximas horas, los detectives de la Policía Federal deberán profundizar sobre los inversores que tenía Benedit en la «cueva» de Retiro".
Cuando los informantes hablan de la "cueva", hacen referencia a la oficina que Benedit tenía en Esmeralda al 1000 y donde hay indicios de que se cambiaban cheques y dólares, según explicaron calificadas fuentes que participaron del allanamiento hecho el jueves pasado, 24 horas después del hallazgo del cadáver.
En el último parte informativo difundido por Bugeiro por medio del sitio de Internet de la Procuración General de la Nación, www.fiscales.gob.ar, además de definir la situación financiera de Benedit como "comprometida", se sostuvo que pocas horas antes de su desaparición "efectuó un retiro de dinero". Algunas fuentes del caso sostienen que esa suma asciende a los 250.000 dólares, en un primer momento se había dicho que eran US$ 180.000 y 100.000 pesos.
No se descarta que en las próximas horas sean llamados a declarar como testigo los familiares de Benedit para que cuenten si conocían algún tipo de presión de la que el asesor financiero fuera víctima.
"Si se confirma la hipótesis del suicidio y se descarta la teoría de que haya sido instigado a hacerlo, no habrá mucho más para investigar. A lo sumo un juez debería iniciar una investigación sobre la presunta «cueva» de la calle Esmeralda al 1000. La palabra de la familia será fundamental para conocer si en algún momento recibió una amenaza o comentó sobre una supuesta presión de algún acreedor", explicó un detective que colabora con los investigadores.
Cinco días después de la desaparición y muerte de Benedit sigue sin aparecer aún la moto Honda Tornado 250, color blanca, patente 876-IEF que tenía el asesor financiero. Después del testimonio de dos empleados del astillero Tandanor que declararon haber visto el vehículo estacionado, con el casco apoyado en el asiento y con las llaves puestas, los investigadores están convencidos de que alguien que pasó por el lugar la robó.
"Casi seguro que la moto fue robada y cuando en los medios de comunicación salió la noticia del hallazgo del cadáver de Benedit, el delincuente que se la llevó decidió ocultarla porque sin saberlo se había llevado un botín muy caliente", explicó una fuente oficial.
La otra incógnita, que era la vaina del proyectil, fue resuelta anteayer, cuando fue encontrada a un metro de donde fue hallado el cuerpo. Estaba enterrada y fue descubierta después de utilizar un escáner prestado por el Ejército argentino.