La víctima, identificada como Manuel Ignacio López Pujato, de 26 años, hacía entrenamiento militar de alta densidad y se descompensó durante una clase de calentamiento.
Un nuevo caso de muerte tras ejercicio extremo sacude a la opinión pública y vuelve a poner en el tapete los riesgos de la gimnasia sin restricciones o bajo la ausencia de controles médicos.
Manuel Ignacio López Pujato, un joven de 26 años oriundo de Santa Fe, pero que reside en Buenos Aires, murió en las últimas horas cuando se descompensó en medio de una práctica de crossfit, un entrenamiento militar de alta intensidad en un gimnasio del barrio de Recoleta, ubicado en la calle Ayacucho al 1200, según informó la señal de noticias TN.
El diario La Nación intentó comunicarse con Bigg Crossfit Recoleta, pero no fue posible. En su página de Facebook, dejaron un mensaje que mencionaba que el lugar permanecerá cerrado durante toda la jornada.
Más avanzada la mañana y desde un móvil de Radio Continental, allegados al establecimiento precisaron que Manuel murió durante una "clase de calentamiento". Según comentaron, era un cliente habitual, que hacía ejercicio dos veces por semana y había presentado oportunamente el certifificado médico requerido. Concurría al gimnasio desde hacía seis meses.
Por el momento, no trascendieron mayores detalles del deceso, que pone en alerta sobre la necesidad de realizar chequeos de rutina y periódicos cuando se encaran ejercicios de esta naturaleza.