Se trata de la primera consecuencia directa por la cesación de pagos. El diagnóstico constituye un grave revés para las expresiones del gobierno argentino.
Uno de los diagnósticos más duros sobre el default acaba de producirse y activa las primeras consecuencias directas de compensación económica. La Asociación Internacional de Swaps y Derivados (ISDA, por su sigla en inglés) determinó que el cese de pagos en que cayó la Argentina constituye un default, pese a la negativa del gobierno argentino.
La deliberación fue pedida por el banco suizo USB y se considera el primer paso para cobrar títulos relacionados con una declaración de default.
El diagnóstico constituye un grave revés para las expresiones del gobierno argentino en el sentido de que no hay default y es el primero con derivación económica automática.