El escandaloso hecho ocurrió en Cipoletti, Río Negro. Una criatura de 10 meses debió ser internada de urgencia luego de haber comido el contenido de una bolsita.
Una beba de solo 10 meses de vida debió ser internada de urgencia luego de haber comido el contenido de una bolsita, que tomó de la mesita de luz de los papás.
La menor que fue trasladada a una clínica privada local, se recupera gracias a la excelente labor de los profesionales que la atendieron, que con celeridad dominaron la situación.
A pesar del cerrado hermetismo, trascendió que la pequeña tomó de un cajón una bolsita, la que llevó rápidamente a la boca. Aunque logró ingerir la sustancia, se supo que los padres la llevaron a un centro asistencial donde enseguida los médicos evitaron la intoxicación. La misma clínica hizo la denuncia y ahora se abrió una causa judicial para determinar la responsabilidad que les cabe a los padres.