La exestrella del fútbol debió ser ingresado en un hospital, luego de quedar en un deplorable estado por una nueva borrachera.
Paramédicos y policías fueron llamados después que la leyenda del fútbol fuera visto desplomándose frente a su casa aferrado a una botella de vodka.
El ex seleccionado inglés iba a ser desalojado del exclusivo departamento que arrendaba, ya que los vecinos se habían quejado recientemente por el ruido.
Amigos del ex jugador declararon que llevaba semanas bebiendo, por lo que era predecible que la situación iba a terminar de esta forma.
En enero, Gascoine se había internado en una exclusiva clínica para buscar, por séptima vez, rehabilitarse del alcohol, sin embargo, volvió a recaer y ahora se teme por su futuro.