El Tomba venció al Fortín por 1 a 0, que sufrió su cuarta derrota en fila y sigue complicado con el promedio de descenso.
Godoy Cruz se hizo fuerte este jueves en Liniers en el encuentro adelantado de la fecha 12 y venció por 1-0 a un Vélez que no logra salir del pozo que lo mantiene a un paso del abismo de la zona de descenso. Haciendo gala de su eficacia, el Tomba consiguió tres puntos que lo mantienen bien posicionado en el pelotón que persigue a Boca en lo alto de la Superliga.
Aunque lejos de generar un asedio y muy endeble en el fondo, el conjunto dirigido interinamente por Marcelo Gómez generó las mejores chances a los largo del encuentro, aunque se topó con sus propias limitaciones y nerviosismo y con el arquero Leonardo Burián. El uruguayo le tapó la primera llegada a Nicolás Delgadillo y Matías Vargas ejecutó un tiro libre muy cerca del ángulo; sin embargo en una contra casi abre el marcador Gastón Giménez con un solitario cabezazo desviado.
En el complemento, Burián le ganó un mano a mano a Maximiliano Romero y otro disparo a quemarropa de Nicolás Domínguez, mientras que Federico Andrada resolvió solo y sin puntería. Pero a los 23 minutos llegó la definición. El ingresado visitante Juan Garro se escapó por la izquierda y envió el centro pasado que Victorio Ramis cabeceó de palomita para vencer a César Rigamonti.
El gol terminó con los ímpetus del local, que no encontró más peligro pese a los ingresos de Jonatan Cristaldo y Jorge Correa, y el partido se encaminó sin más sobresaltos. Los mendocinos se llevaron así un premio excesivo, amparados en la crisis de un Fortín que deberá torcer el rumbo si no quiere dirigirse sin escalas al sector más temido.