El Canalla se sacó la mufa tras igualar 1-1 en los 90 minutos se impuso por 4-1 en la tanda de penales y se quedó con la Copa Argentina.
Rosario Central le ganó 4-1 en la definición por penales a Gimnasia y Esgrima La Plata, luego de empatar 1-1 en el tiempo reglamentario, y se pudo sacar por fin la espina de levantar la Copa Argentina, en su cuarto intento. Además de ganar este trofeo por primera vez en su historia, el equipo de Edgardo Bauza se llevó como premio la clasificación a la próxima Copa Libertadores.
Fernando Zampedri, a los 18 minutos del primer tiempo, puso en ventaja a Central y Lorenzo Faravelli, a los 6 de la etapa complementaria, anotó el empate para Gimnasia, que quedó a un paso de cortar la sequía de un cuarto de siglo sin títulos.
Para llegar hasta esta consagración, la primera desde la Copa CONMEBOL 1995, Central superó a Juventud Antoniana, Talleres de Córdoba, Almagro, Newell’s Old Boys y Temperley.