El abogado Pablo Anahuate brindó detalles de la denuncia presentada en la Oficina de Gestión de Audiencias de los tribunales santiagueños por parte del cabo que era hostigado por un comisario.
“Sin perjuicio de la calificativa que puede poner la fiscal, consideramos que hubo abuso y acoso. En el artículo 19 del Código Penal, el bien protegido es la libertad sexual. Y aquí creemos que se violó ese derecho: hubo tocamiento de sus partes íntimas, hubo insinuaciones sexuales, acoso. Aportaremos las pruebas necesarias tras presentarnos en calidad de querellante”, señaló el doctor Anahuate en diálogo con Noticiero 7.
Si bien aún la fiscal Jésica Luna, que entiende en la causa, no brindó la calificativa, el abogado querellante considera gravísimos los hechos a los que era sometido el cabo de policía. Y es aún más grave dada la jerarquía que tenía el denuncido sobre el denunciante.
“Mi defendido era perseguido, amenazado, intimidado. Le otorgaba arrestos que después lo afectaban en su vida personal: no podía ver a sus hijos, y eso también es grave. Queremos también que esto se vea reflejado como un mensaje para la sociedad toda: que no deben tolerar estos casos de abusos. Él venía aguantando muchos meses y hoy está pasándola mal. Está medicado con ansiolíticos. La pasó realmente muy mal”, señaló el abogado.
Hoy también se efectivizó la entrega del arma reglamentaria del cabo en Sanidad Policial, ya que los profesionales que lo asistieron determinaron que no está en condiciones de portarla.