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El “vapeo” gana terreno en Santiago del Estero: en qué consiste y cuáles son sus riesgos

Hablar del vapeo es cada vez más común en el mundo entero. Pero, qué conoces de esta práctica que se impone cada vez más en la provincia. Una “moda”, ¿peligrosa?

13/09/2019

¿Qué es vapear? ¿Es lo mismo un cigarrillo electrónico que un vapeador y de qué está hecho? ¿el hábito de vapear, realmente ayuda a fumadores a dejar el cigarrillo? ¿Vapear es igual de perjudicial a la salud que fumar? ¿Es más caro o más barato vapear? ¿pueden vapear los niños?, son algunas de las preguntas qué DiarioPanorama.com realizó a un neumonólogo, a usuarios y a vendedores de equipos en la provincia. 

Hasta hace unos años atrás, Claudio, un joven profesional santiagueño, llegó a fumar casi un paquete de 20 cigarros por día. Cuando comenzó a sentir molestias constantes en la garganta y en el pecho empezó a esforzarse para fumar un poco menos y buscar alguna alternativa que lo ayudara. Navegando por internet encontró un dispositivo electrónico llamado “vapeador” y experiencias de sus usuarios que aseguraban que gracias a esto habían logrado dejar el cigarrillo. 

Claudio vapea hace aproximadamente dos años y contó que al principio seguía fumando paralelamente, pero de a poco fue disminuyendo la cantidad. El día de hoy ya no fuma cigarrillos convencionales y sólo mantiene el hábito del vapeo con un porcentaje muy bajo de nicotina. 

Pero, ¿qué es un vapeador?

Se trata de un dispositivo electrónico que quema un liquido especial para crear vapor, el cual es aspirado de la misma manera en que se lo hace con un cigarrillo. Ese líquido está hecho a base de propilenglicol, glicerina vegetal y nicotina

El Dr. Javier Rosas (MP 1895), especialista del hospital Neumonológico de Santiago del Estero, “Dr. Gumersindo Sayago”, aseguró a DiarioPanorama.com que estos componentes son nocivos para la salud respiratoria y pulmonar. 

“El vapeador y el cigarrillo electrónico es lo mismo. Ahora le llaman vapeador por una costumbre de otros países, pero es lo mismo”, nos asegura Rosas en el comienzo de la charla en su consultorio. 

“El cigarrillo electrónico contiene nicotina, en menos cantidad que un cigarrillo clásico, pero tiene. Los electrónicos funcionan con esencias para modificar el sabor, pero para que esa esencia le de al fumador la sensación de estar fumando, le ponen nicotina, que es algo nocivo para la salud de las personas”, precisó el neumonólogo.

“Particularmente, no me ha tocado atender ningún caso de un paciente que presente algún daño por el uso del vapeador y no sé de ningún caso aquí en Santiago. Pero hace aproximadamente un mes se publicó la noticia de un hombre que demandó a una empresa fabricante de estos cigarrillos electrónicos en Estados Unidos por haberle provocado una lesión pulmonar y problemas respiratorios”, relató Rosas, y agregó: “Sí he tenido casos de gente que me ha consultado si vapear conviene más que fumar un cigarrillo normal. Yo les explico que también tienen sustancias químicas nocivas para la salud, como la nicotina, en menor medida que un cigarrillo normal, pero la tiene”. 

Cómo gana terreno el “vapeo” en Santiago

Guadalupe y Fernando son un matrimonio que hace aproximadamente cuatro años venden vapeadores, líquidos e insumos relacionados al vapeo aquí en Santiago del Estero. Ellos comentaron todas las virtudes de este hábito, sin dejar de advertir sobre los desventajas o los perjuicios que esto produce. 

Los líquidos con los que se usa un vapeador tienen la posibilidad de controlar el nivel de nicotina a la hora de su elaboración. Cuando una persona que fuma mucho desea dejar el hábito, reemplazándolo por el vapeador, lo hace comenzando a usar un líquido con un porcentaje alto de nicotina, el que podría ser de un 25 o 30%, y luego lo disminuye con el pasar del tiempo hasta, en el mejor de los casos, llegar a 0%. 

De las tres sustancias más cuestionadas, sin miedo a equivocación, el Dr. Rosas asegura que la más perjudicial para los pulmones es la nicotina. A la larga, el propilenglicol y glicerina vegetal también provocan daños al sistema respiratorio y a los pulmones principalmente, pero es mucho más dañina la nicotina. “Estos líquidos tienen que tener nicotina porque es la sustancia que le provoca sensación de saciedad al cerebro. Si vapean con un líquido que no contenga nicotina, a la larga o a la corta vuelven al cigarrillo porque no obtienen la misma sensación”, explicó. 

También, el profesional de la salud sentenció: “Si bien la cantidad de gente que vapea es poca, ha crecido en los últimos años. Por suerte son pocos los vapeadores, en relación a los fumadores, al menos en Santiago del Estero. Aún no es un hábito que equipare los números alcanzados por los fumadores, pero de igual manera, la Sociedad de Medicina Respiratoria a nivel mundial está en contra del uso de vapeadores, por los químicos que contiene el líquido con el que se usa”. 

Diferencia entre vapeador y cigarrillo electrónico

Un vapeador y un cigarrillo electrónico, no es lo mismo. El cigarrillo electrónico es un artefacto plástico que solía venderse hace unos años atrás, que tenía la forma como de una lapicera. También se lo conocía como “CE4”, explicó Fernando. 

Guadalupe contó que gracias al vapeo ella dejó de fumar y, a raíz de esto obtuvo otros beneficios. “Hace dos años que directamente no fumo nada. El vapeo te cambia la vida. Tiene muchas ventajas sobre todo para la mujer porque no te deja olor en el pelo, no te reseca la piel, no te mancha las uñas ni los dientes, no le provoca ningún daño a la persona que se tiene al lado, que son problemas más comunes que afronta un fumador de cigarrillo tradicionales”, aseguró. 

“Los líquidos que usa un vapeador tienen que ser procesados en un laboratorio y tienen que estar bien preparados. Los que vendemos nosotros son originales, de marca, están sellados, en la caja del fabricante (…) Desgraciadamente, en Santiago hay gente que vende líquidos preparados por ellos mismos, sin ningún tipo de control de calidad y seguridad y eso es algo sumamente peligroso para quien lo use”, cuenta Guadalupe al momento de hablar de los “clones” que existen en este rubro. 

“Clon” se le denomina a los productos de fabricación alternativa a los originales, que son los que están probados y cuentan con una garantía de fabricantes y controles de calidad. 

Se pueden encontrar clones de vapeadores, de líquidos y de insumos. “Hemos llegado a ver algunos productos con modificaciones caseras, que usan productos y accesorios que no se deberían usar porque representan un gran peligro para quien los usa”, cuenta Guadalupe y agrega “Ese ese nuestro gran competidor comercial, los productos clones. Siempre asesoramos a nuestros clientes y le mostramos a quienes vienen a consultarnos sobre este tema. Inclusive tenemos en el local productos clones o truchos para mostrarle las diferencias y qué es lo que tienen que tener en cuenta a la hora de adquirir un equipo de vapeo”. 

Cuando se habla de las consecuencias del vapeo, uno de los comentarios más comunes es el uso que hacen los jóvenes, menores de edad, y hasta inclusive niños.

Fernando explica que el objetivo del vapeo fue siempre ayudar al fumador a dejar ese hábito, a reemplazar el cigarro por el vapeador y disminuir el porcentaje de sustancias nocivas para la salud. Pero se puede decir que uno de los daños colaterales de esta práctica es la moda y cómo ésta ha ido ganando algunos espacios que son difíciles de controlar. La práctica del vapeo se ha extendido a grupos de gente cada vez más joven hasta llegar a niños. 

Por su parte, el Dr. Rosas indica que este es uno de los principales problemas que causa el vapeo: la iniciación de los jóvenes en el hábito de fumar. “Se ha podido observar que muchos comienzan entre los 12 y 18 años. Vapean con poca nicotina, pero lo hacen y de esta manera se inician gradualmente en el cigarrillo”, asegura. 

“Hay niños, de alrededor de 11 años, que comienzan a vapear. Lo hacen con líquidos sin nicotina, más que nada porque juegan a hacer los círculos con el humo y cosas por el estilo”, cuenta Fernando y explica que ellos no venden sus productos a menores de edad, pero ven que muchos padres compran equipos y líquidos para dárselos a sus hijos. 

“Son totalmente conscientes de todo lo que es el vapeo, nosotros les explicamos todo. Pero ellos les compran un equipo y líquidos sin nicotina porque prefieren que vapeen a que fumen. Y en eso ya no nos podemos meter, es una decisión de cada padre”, cuenta Fernando. 

Por su parte, aseguran muchos usuarios, la idea del vapeo es que sea una ayuda para que el fumador deje el hábito. “Pero, si un chico que no fuma comienza a vapear, a la larga o a la corta, puede que termine fumando”, sostienen. 

Las respuestas de los usuarios de vapeador, comerciantes del rubro y el neumonólogo permiten asegurar que “el vapeo es perjudicial para la salud, pero en mucho menor porcentaje que un cigarrillo”. Las ventajas o las consecuencias dependerán de cada persona, de cómo afronte el hábito y qué logre con él, sentenciaron los entrevistados.