El Millo lo ganaba y alcanzó el empate, pero Mauro Vigliano lo anuló por una falta. Además, a River le anularon otro.
Hubo polémicas en este 2-0 de River a Estudiantes, que lo puso en la final de la Copa Argentina. En el primer gol del Millo, en uno que fue mal anulado a Borré que decretaba el 2-0 y en el final una muy polémica que era el 1-1 de Estudiantes.
A los 45' del ST, Armani dio rebote en un remate lejano de Figueroa y tardó en reaccionar para ir a buscarla; cuando lo hizo, llegó casi junto a Lautaro Díaz, quien la terminó empujando a la red. Pero el arquero tuvo la suerte de alcanzar a aprisionar la pelota con la mano izquierda contra el piso; cuando lo hace, es como si la tuviera entre las manos y ya no se la pueden disputar, que es lo que hizo Díaz: se la pateó y se la sacó para luego convertir, por lo que el gol está bien anulado.
Claro que igual fue polémica la jugada. Porque fue muy rápida, de TV. Vigliano acertó, pero hubo quejas de quien había hecho el gol, en el momento, y también todo Estudiantes fue a reclamar luego del 2-0. Si lo empataba, hubiese forzado los penales.
¿Qué dice la regla 12?
El guardameta estará también en posesión del balón en sus manos cuando:
-Retenga el balón en las manos o entre la mano y una superficie (p. ej. el suelo, su propio cuerpo) o cuando lo toque con cualquier parte de las manos o los brazos, excepto si el balón rebota en el guardameta o después de que este haya efectuado una «salvada»
-Sostenga el balón con la mano abierta y extendida
-Haga rebotar el balón en el suelo o lo lance al aire. Mientras el guardameta esté en posesión del balón en sus manos, ningún adversario podrá disputárselo.
Un error del juez de línea le impidió a River asegurar el resultado frente a Estudiantes de Caseros por las semifinales de la Copa Argentina. A los 32 minutos del segundo tiempo, Milton Casco logró un buen remate por izquierda, atajó Facundo Altamirano, en el rebote pegó la pelota en el travesaño y finalmente empujó Rafael Santos Borré, aunque la acción fue anulada por offside. No obstante, la repetición demostró que el colombiano estaba habilitado.