Santiago del Estero, Viernes 19
Abril de 2024
X
Somos Deporte

Las cinco razones por las que Miguel Russo es el favorito en Boca

El entrenador pica en punta para volver a dirigir al equipo en el 2020.

10/12/2019

Gustavo Alfaro no seguirá en su cargo de entrenador de Boca. Juan Román Riquelme ya trabaja en el equipo para el 2020 y arrancará por el director técnico. Si bien hay nombres en carpeta como el de José Pekerman, Martín Palermo y Jorge Almirón, el que parece tener más chances es Miguel Ángel Russo.

Hay cinco razones por las que Russo, a los 63 años y después de haber superado hace dos años un cáncer, podría ser el nuevo entrenador de Boca. Muchas de ellas vinculadas a su experiencia en la Copa Libertadores. Aquí algunos puntos que juegan a favor del DT:

La cercanía a Román

Es, sin dudas, el comienzo de la historia. Y no porque sea lo más importante. Pero sí tiene mucho peso la afinidad que los une. En aquel 2007 forjaron una gran relación que se mantuvo en el tiempo. Y cada vez que debieron hablar públicamente el uno del otro, lo hicieron con marcados elogios. "Román fue el mejor jugador que dirigí", dijo Russo sobre el 10. Y la devolución también fue en el mismo tono: más allá del reconocimiento hacia el equipo de la Copa del 2007, Riquelme también apuntó justamente al costado humano del DT. "Es un gran entrenador y una gran persona que a mí me ha ayudado a disfrutar mucho los meses que lo tuve", sostuvo.

La experiencia en Libertadores

"Dirijo Copa desde el 96", suele decir Russo cuando se lo consulta al respecto. En efecto, en aquel año fue su primera vez, al mando de un gran equipo como la U de Chile, que tenía a Marcelo Salas y Leo Rodríguez como figuras y que llegó a una instancia histórica para el club: cayó en semifinales ante River en una serie muy pareja. Pero fue sólo el inicio. Además de ser uno de los tres técnicos de la historia de Boca en ganarla (junto al Toto Lorenzo y Carlos Bianchi), Miguel dirigió 70 partidos de Libertadores y lo hizo en varios clubes de países diferentes: Boca, Vélez, San Lorenzo, Central, U de Chile, Millonarios, Alianza Lima y Cerro Porteño, su último equipo. Es decir, conoce el torneo como pocos entrenadores. Y a eso hay que sumarle que, internacionalmente, tiene casi 100 encuentros dirigidos.

El respeto en la Conmebol

Russo es uno de los técnicos con más prestigio del continente y es muy reconocido en la Confederación Sudamericana de Fútbol. Suele asistir a los distintos eventos que organiza la Conmebol, siempre es invitado a los sorteos de las Copas y tiene una muy buena relación con el presidente, Alejandro Domínguez. De hecho, previo a la final de la Libertadores 2018 entre River y Boca, fue homenajeado junto a Ramón Díaz en Madrid. Allí se alojó en el hotel de la CSF, como también pasó con el ex DT millonario. En la idea que tienen Riquelme y Pergolini de empezar a pisar fuerte en la Conmebol esto no es un detalle menor: tener un técnico respetado por la dirigencia de ese organismo suma a la causa. De hecho, una de las primeras misiones de Riquelme como dirigente será ir a la sede en Paraguay a presentarse y participar del sorteo de la Libertadores 2020, que tendrá a Boca como cabeza de serie.

El conocimiento del Mundo Boca

También es un punto que juega a favor de Russo. Aunque estuvo solo un año y tuvo el respaldo de un éxito como la Libertadores, fue un DT que supo manejarse bien en un ambiente tan difícil y el hecho de conocerlo, de saber de qué se trata, le suma como candidato frente a otros que deberían afrontarlo por primera vez. Lo que pasó con Alfaro, de alguna manera, también responde a esta situación no menor. Para Román y para muchos hombres del club, Lechuga sufrió a Boca y eso terminó por desgastarlo (más allá de su estilo de juego, que tampoco gustó, claro). Incluso, desde las declaraciones, algo que también condenaron el ciclo del reciente entrenador, Miguel asoma como un técnico más medido, de pocas palabras y lejano a las polémicas.

Un cuerpo técnico con Battaglia

En su último paso por Cerro Porteño, Russo tuvo de ayudante de campo a Leandro Somoza, a quien dirigió en Vélez (fueron campeones) y que también jugó en Boca. Es decir, a ese club ya no fue con su histórico cuerpo técnico, que tenía a Hugo Gottardi como colaborador directo y a Guillermo Cinquetti como preparador físico (el Profe en su paso por Paraguay fue Damián Lanatta). Pero además, la idea de Román sería que a ese staff se incorpore Sebastián Battaglia, también campeón con Miguel de la Copa 2007.

De este modo, su cuerpo técnico tendría una pata fuerte del club como el jugador más ganador de la historia, y también la cercanía generacional que tanto él como Somoza pueden aportar en el plantel. Battaglia, además, es uno de los hombres que Riquelme eligió para su Consejo de Fútbol, pero al ser entrenador, podría ser el colaborador desde el mismísimo campo para la gestión.

Por todas estas razones, Russo pica en punta. Pero en estas horas, seguramente, Riquelme dará a conocer sus candidatos para el banco que deja Alfaro, tal cual lo prometió en plena campaña.