Las ciudades de frontera tienen un alto índice de criminalidad. La mayoría de los asesinatos lo protagonizan jóvenes o adolescentes.
Un joven de 24 años fue ultimado de varias puñaladas en un barrio de la periferia de la ciudad de Tartagal, al norte de la provincia, en circunstancias aún no esclarecidas, y por el hecho de sangre un joven de 20 años fue detenido a las pocas horas del deceso de la víctima, quien falleció en el quirófano del hospital Juan Domingo Perón de la ciudad norteña.
La terrible agresión, que se suma a otros tantos casos ocurridos en los primeros días del 2020, consternó una vez más a la comunidad de los pueblos originarios.
La violencia extrema en las ciudades del norte es una constante, y fuentes oficiales indicaron que la mayoría de los hechos de sangre en la zona de frontera tienen como protagonistas a personas jóvenes o muy jóvenes, tanto las víctimas como también victimarios. No es un dato menor, ya que las comunidades y los vecinos en general atribuyen este tipo de violencia a la proliferación de las adicciones, a la pobreza estructural, la falta de trabajo y de oportunidades para la juventud de la zona de frontera.
El crimen se produjo en horas de la madrugada y trascendió que el móvil habría sido un posible ajuste de cuentas.
De todas maneras, la Policía continúa las investigaciones para esclarecer la muerte del joven en Misión Tapiete.
La investigación está bajo la dirección de la Unidad Fiscal de Graves Atentados contra las Personas de Tartagal.
Fuentes oficiales confirmaron anoche que una persona fue puesta a disposición de la Justicia, acusada por el crimen.
Trascendió que el hecho de sangre se produjo pasadas las 2.45 y que el mismo fue denunciado por vecinos.
Al llegar al lugar el personal policial halló lesionado a un joven perteneciente a una de las etnias que cohabitan en la misión. El joven fue hallado agonizante en intersección de calles Tucumán y Manuel Dorrego de la ciudad norteña.