La joven está radicada en Corea del Sur hace siete meses. “La gente anda con precaución y prefiere no salir. Vivimos encerrados”, señaló a Diario Panorama.
Corea del Sur ya es, después de China, la nación más afectada por el coronavirus. Este martes los organismos oficiales confirmaron que hay 977 infectados. La región más crítica es Daegu, al sur del país, es el principal foco de contagio del coronavirus en Corea del Sur.
La santiagueña Evelyn Rodríguez Ocaranza, de 29 años, vive en Suwon, un conglomerado de 1.100.000 personas, ubicado a 30 kilómetros de Seúl. Suwon es conocida también como la ciudad de Samsung. Allí, el gigante tecnológico tiene una de sus más grandes sedes de todo el mundo. Vivir ahora en Corea del Sur es algo arriesgado, así lo sostienen los organismos de salud.
Evelyn le contó a Diario Panorama que, si bien su ciudad no es de las complicadas, “la gente anda con precaución o prefiere no salir. En mi caso, no salgo a ningún lado estos días”.
“Hay controles estrictos. Aquí hay siete infectados. Se hacen controles en cada lugar: oficinas, bancos. Controlan la temperatura y sí o sí debemos usar barbijos. Si salimos tenemos que hacerlo con barbijo siempre, lavarnos las manos con frecuencia, tratar de no asistir a lugares donde hay mucha gente. En pocos días, la situación se puso muy grave”, explicó.
Evelyn vivía en el barrio Vinalar. Se recibió de profesora de Biología y en septiembre del año pasado se fue a vivir a Corea del Sur. Allí se casó y tiene una hija. Dice que no tiene miedo, pero que sí viven con preocupación “porque el virus está avanzando muy rápido. Hasta el 17 de febrero había solo 31 infectados en el país, y de repente se multiplicaron. Cada dia se suman de a cien. Daegu, hoy, es una ciudad desierta”.
La joven madre de 29 años no piensa salir del país. Y en caso de que lo decidiera, no lo haría sola. Confía en las autoridades y en que esta situación de temor y preocupación, pase lo más rápido posible, para que puedan volver a tener la vida normal que llevaban antes del brote.
Situación actual
En varias regiones de ese país se están estudiando medidas de contención, pero descartan un bloqueo como sucede en grandes ciudades de China.
La situación en Corea del Sur se agravó luego de que una mujer, perteneciente a una secta se contagió al acudir a una de las misas. Las autoridades surcoreanas señalaron la semana pasada a una mujer de 61 años como una "supercontagiadora".
Ella dijo que no sabía que había el coronavirus y que lo había transmitido asistiendo a los oficios religiosos. A pesar de que el gobierno pidió a esta iglesia que suspendiera sus misas multitudinarias, hicieron caso omiso.
A este martes, 9.334 de sus fieles han sido puestos en cuarentena. Y todas las críticas han apuntado hacia el mismo lado.