Santiago del Estero, Viernes 29
Marzo de 2024
X
Somos Deporte

A 23 años del escándalo en La Paz y el corte del santiagueño Julio Cruz

En el año 1997 el local se impuso por 2-1 pero todo terminó en bochorno con la agresión al delantero y un corte que le apareció luego del encuentro en el otro pómulo.

02/04/2020

El 2 de Abril de 1997, hace exactamente 23 años y en un partido entre Bolivia y Argentina en La Paz, se originó uno de los mayores bochornos en la historia de las Eliminatorias. El gran protagonista fue Julio Cruz, quien recibió un golpe en uno de sus pómulos y un rato más tarde apareció con un corte en el otro.

La previa de ese encuentro con vistas al Mundial de Francia 1998 traía mucha polémica: Daniel Passarella, en ese entonces director técnico de la Albiceleste, se había quejado por tener que jugar en la altura y lo había definido como “inhumano”. El Kaiser era uno de los propulsores de que prohibieran a aquella ciudad como sede para la competición.

El estadio Hernando Siles fue un verdadero hervidero, dentro y fuera del terreno de juego, por todo lo que se había hablado. El partido lo ganó Bolivia por 2-1, aunque lo más importante sucedió a pocos minutos para el final cuando Cruz buscó una pelota que había salido del terreno y fue agredido con una trompada en el pómulo derecho por el chofer del micro del combinado local.

El delantero santiagueño -sentido aunque sin rastros de sangre- fue llevado al vestuario por Passarella, Luis Seveso y Diego Cagna. A partir de allí, un verdadero papelón: el encuentro continuó sin el técnico en cancha (dirigió Alejandro Sabella, su ayudante), cuando Argentina jugaba con ocho futbolistas (habían sido expulsados Nelson Vivas y Gustavo Zapata) y se habían realizado las tres modificaciones.

Una vez finalizado el partido, y en medio del escándalo que eran los pasillos del estadio, desde el seleccionado nacional     autorizaron a los fotógrafos a ingresar al camarín visitante. La sorpresa fue que Cruz presentaba un corte en el pómulo izquierdo, donde no había recibido ningún golpe, y que era lo que se quería mostrar con el fin de poder pelear en los escritorios.

Nunca quedó del todo claro lo que pasó con el atacante surgido en Banfield. Cuando la coartada albiceleste quedó expuesta en las imágenes, se intentó convencer de que el jugador se había caído camino a los vestuarios. Lo cierto es a pesar del paso del tiempo nadie quiere hacer demasiada referencia acerca de aquel bochornoso acontecimiento.