Las ventas en el país cayeron en un 60%, de acuerdo a Came, lo cual preocupa a los comerciantes santiagueños. Pedirán una autorización especial para trabajar durante el sábado previo al Día del Padre, un día que consideran clave.
La pandemia del coronavirus afectó sensiblemente a los comerciantes del país y Santiago del Estero no es la excepción. Andrónico Suárez representante de la Cámara de Comercio e Industria en la provincia, indicó que las ventas en todo el país cayeron en un 60% situación que las Pymes sienten particularmente.
Por tal motivo, adelantó que solicitarán a las autoridades provinciales se les permita trabajar en un horario especial durante el sábado previo al Día del Padre, jornada en la que consideran podrían repuntar las ventas y llevar algo de alivio al sector.
Suárez se mostró a favor de los protocolos sanitarios ya que "evidentemente ningún propietario de una pymes quiere enfermarse o enfermar a sus empleados" sin embargo, consideró que de no aumentar los contagios en la provincia, podrían trabajar en un horario especial antes del Día del Padre.
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"Es muy difícil mantener un ritmo de ventas, esto sumado a que el transporte reduce a la mitad a la gente que puede ingresar a la zona céntrica. Tenemos la imposibilidad de pagar los alquileres y servicios como corresponde, y todo lo referente a sueldos y aguinaldos es incertidumbre. El Día del Padre es muy importante y sería bueno trabajar el día sábado con un horario especial. Queda tiempo, esperamos que las autoridades nos den la autorización para remontar las ventas", expresó.
Actualmente, los comercios se encuentran trabajando en un horario reducido semanal por las mañanas. "Se trabaja 4 horas por día, es decir 20 horas a la semana, cuando deberíamos hacer cerca de 48, se hace difícil", dijo.