El ministro de Educación aseguró que se volverá a clases de manera escalonada y priorizando a los alumnos que están terminado de nivel educativo.
El ministro de Educación, Nicolás Trotta, aseguró que la infraestructura escolar parte "de una base muy dispar" entre las provincias que empezarán las clases presenciales en agosto y enfatizó que esa disparidad "no es responsabilidad de las escuelas", sino "de los estados nacional, provincial y muncipal"
"La infraestructura escolar es muy dispar según las provincias, es responsabilidad de los estados y no de las escuelas que se tengan los elementos necesarios" para adecuarse a los protocolos acordados por la pandemia, por lo que gran parte de las obras de infraestructura "estarán en cabeza de las provincias", señaló el ministro.
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"Son pequeñas obras, cumplibles y realizables, las transferencias se realizarán en julio y agosto y darán los tiempos para adecuar las escuelas al retorno de los chicos a la clases presenciales", precisó.
El gobierno nacional transferirá 2.300 millones de pesos a las 24 jurisdicciones para que puedan realizar obras en las escuelas, como el acceso al agua potable o la dotación de elementos de higiene.
El criterio de distribución obedecerá a las necesidades de cada sistema educativo provincial "medidos por el grado de vulnerabilidad y la pobreza", explicó el ministro.
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Respecto a los regresos en estas nueve provincias, Trotta explicó que "será en distintos momentos del mes de agosto, ya que cada una de estas jurisdicciones afronta diversas realidades respecto a su situación epidemiológica" y añadió que "no en todos los casos serán solo las escuelas rurales las que retornen primero, sino serán las localidades del interior que incluirán a esa ruralidad".
Debido a las distintas realidades de las provincias "no nos queremos apurar en ninguna decisión, el regreso debe darse cuando epidemiológicamente es posible y cada escuela debe cumplir con los protocolos", sostuvo el ministro.