El Millo está entre la necesidad de vender para saldar deudas y el deseo de Marcelo Gallardo de mantener un equipo competitivo.
La crisis económica por la pandemia de coronavirus no es ajena a los equipos del fútbol argentino. Ni siquiera a los grandes. River es uno de ellos y, como si fuera poco, la institución posee un déficit financiero que estimula una necesidad: vender para comenzar a equilibrar las arcas.
Uno de los jugadores más solicitados en este mercado de pases es el lateral derecho Gonzalo Montiel, por quién en las últimas horas West Ham aceleró para quedarse con sus servicios.
Si bien aún no apareció una oferta formal, se estima que desde Inglaterra dispondrán de una cifra que ronda los 8.000.000 de euros limpios para el conjunto Millonario.
La cláusula de 20.000.000 de euros firmada en la renovación del contrato es una utopía por la economía mundial y desde la dirigencia no verían con malos ojos esta posibilidad.
Esta situación pone de manifiesto el descontento de Marcelo Gallardo, que no pretende perder una pieza importante para el funcionamiento del equipo de cara a la definición de la Copa Libertadores.
Es que actualmente, el lateral no posee un reemplazante natural y debería salir a buscar uno en el mercado. El juvenil Elías Gómez aparece únicamente como posibilidad o intentar un cambio de esquema.
El entrenador prefiere la venta de un marcador central como Lucas Martínez Quarta, ya que tiene gran proyección para el fútbol europeo y cuenta con futbolistas en el plantel que pueden ocupar el puesto sin tener la necesidad de comprar.
Los directivos deberán decidir en caso de que llegue la oferta formal: ¿Acomodar la economía o respetar el deseo de Gallardo?