El intendente Héctor Ibáñez resaltó la figura del ilustre maestro y valoró a los que enseñan de corazón.
La tradicional Plaza Sarmiento fue el lugar elegido para rendirle un merecido homenaje a los maestros y maestras en su día. El acto fue organizado de manera conjunta entre el área de Prensa del Gobierno de Añatuya y el Jardín de Infantes Rinconcito de Luz.
Estuvieron presentes el intendente Héctor Ibáñez y concejales. Hubo momentos especiales y emotivos como por ejemplo cuando los niños entonaron las estrofas del himno nacional utilizando el lenguaje de seña.
Los invitados presentes fueron la directora Blanca Paredes (Escuela Rompehielos A. Irizar que el próximo mes cumple 100 años de vida institucional), Mirna Chazarreta (Directora de la escuela en el Paraje Kilómetro 11) y Patricia Escalada (Directora en la escuela del paraje Malacara). La ofrenda floral estuvo a cargo de Maximiliano Campos y Sofía Caro, docentes egresados durante la pandemia en el Instituto de Formación Docente N° 1 Mons. Jorge Gottau, junto a padres que cumplieron un rol importante en el proceso de enseñanza aprendizaje de sus hijos a través de las clases virtuales.
A su turno el Pastor Rubén Timofeijuk agradeció por su vocación a los docentes y a su turno el intendente Héctor Ibáñez- en diálogo con la prensa- indicó “un agradecimiento para los que ya no están, pero que siguen siendo nuestros maestros. A los que están y se convierten en faros para todos, de manera especial para nuestros niños. La enseñanza que deja huellas es la que se hace de corazón a corazón”. Luego de la reflexión final del intendente Ibáñez, finalizó el emotivo acto rindiendo un justo y merecido homenaje a los maestros de la ciudad y zona rural.