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Aparecen las imágenes del romance entre Luis Miguel y Lucila Polak

Es la historia de amor del momento. Lucial Polak era hasta hace poco la novia de Al Pacino. Ahora se pasea del brazo del cantante.

26/09/2012

Todo el mundo habla de Lucila Polak (33). Era, hasta hace días, "la novia de Al Pacino". Imposible olvidarla. Este verano pasó por Punta del Este, encandiló a los fotógrafos con su belleza y posó junto a su hija Camila en la tapa de ¡Hola! Argentina. Hace dos semanas trascendió la noticia de su ruptura con el actor de Hollywood tras cinco años de noviazgo. Solo ellos conocen los motivos. Y ahora la prensa mexicana la presenta como "la nueva novia de Luis Miguel". Hay imágenes que prueban una relación. Aparecen juntos, tomados del brazo, cruzando miradas cómplices, compartiendo una comida en Las Vegas. ¿Dirán que solo son "buenos amigos"? Si bien Lucila se incorporó a The Hits Tour (la gira con la que el cantante celebra sus 30 años con la música) como corista, no se trató de una salida "de camaradería" junto al resto de la banda: únicamente los acompañó Michelle Salas, la hija mayor del cantante. Los periodistas del Distrito Federal no tienen dudas: "La relación entre Lucila y "El Sol" es tan estrecha que ya la presentó a su familia".

¿QUIEN ES ESA CHICA?

En Hollywood la conocen como Lucila Solá –"Un representante me recomendó cambiar mi apellido por uno más latino, acorde con mi apariencia", recuerda en cada entrevista–, pero saben muy poco de su historia. Es hija de Federico Polak, vocero de Raúl Alfonsín e interventor del PAMI en tiempos de la Alianza. Sin vocación, solo para cumplir con el mandato familiar, empezó la carrera de Abogacía. Pero abandonó a los 18 años, poco después de terminar el CBC, para seguir a su novio –el modelo Máximo Marrone– alrededor del mundo. Convivieron durante algún tiempo en París, hasta que finalmente recalaron en Los Angeles. Tuvieron una hija, a la que bautizaron Camila (14), y se separaron poco después. Lucila intentó retomar sus estudios: probó con Sociología, en la prestigiosa UCLA, pero no llegó a graduarse. Poco después resolvió que quería ser actriz, se preparó y consiguió algunos papeles. Hoy suma catorce películas en su currículum. En 2007 conoció a Al, el gran amor de su vida, y comenzó su desfile hipnótico por las alfombras rojas más prestigiosas del mundo.

PASION EN HOLLYWOOD

La historia de amor entre Lucila y Al Pacino (72) bien podría ser el guión de una película romántica. Ella, la chica latina que decide instalarse en Hollywood para hacer realidad el sueño de convertirse en una gran actriz. El, la megaestrella de cine, premiado, consagrado, señalado por muchos como "uno de los mejores actores del mundo". Una fiesta de cumpleaños de un amigo en común, un cruce de miradas, algunas palabras dichas al pasar y el comienzo de una gran relación. "¿Si creo en la amistad entre el hombre y la mujer? Me parece que muchas veces es el camino para que finalmente termine pasando algo. Amigos con toques de histeria y seducción…", confesaría luego Lucila. Durante dos años, llevaron adelante un vínculo lleno de complicidades y tiempos compartidos, pero recién a fines de 2007 se animaron a ir un poco más allá y se pusieron de novios. "Encontré en él todo lo que estaba buscando en un hombre. Tenemos una conexión especial", decía Lucila. Compañeros de profesión y aventura, la pareja paseó su amor por diferentes aeropuertos del mundo y pisó fuerte en la alfombra roja de los festivales y entregas de premios más prestigiosos del espectáculo: Venecia, los Tony Awards, los Emmy, Golden Globes… Aunque Lucila y Al son vecinos en Beverly Hills, jamás convivieron. Tampoco fantasearon con casarse. Hace apenas unas semanas, la actriz visitó a su familia en Buenos Aires y les confió a sus íntimos que el noviazgo con el ganador del Oscar por la película Perfume de mujer había llegado a su fin. La última vez que se los vio tomados de la mano fue en el Jameson Dublin International Film Festival, donde presentaron el film Wilde Salomé. "Una película que editamos juntos, un proyecto muy nuestro", confesó Lucila.

LOS PRIMEROS ENCUENTROS

Nadie sabe con precisión cuándo se conocieron. Las primeras fotografías de Luis Miguel junto a Lucila fueron tomadas en marzo de 2008, cuando "El Sol de México" –como llaman al cantante– se retiraba del club nocturno La Villa, en West Hollywood. Según las crónicas de la época, "se lo vio muy efusivo y contento con una dama que trató de cubrirse en todo momento de las cámaras. (…) Salió a las tres de la mañana, de la mano de una hermosa mujer morocha y de porte muy latino". En aquel momento nadie consiguió revelar la identidad de la misteriosa acompañante. Era, se sabe recién ahora, Lucila Polak. La prensa mexicana usó aquellas imágenes para confirmar un rumor que llevaba meses circulando por las redacciones: Luis Miguel se había separado de Aracely Arámbula, la madre de sus dos hijos menores.

El segundo capítulo de esta historia sucedió poco después. Quedó registrado en el video de "Te desean", primer track del disco Cómplices. Luis Miguel y Lucila aparecen caminando juntos por la playa, en algún lugar de México. Van descalzos por la orilla, vestidos de blanco, abrazados. En un momento, apenas comienza el clip, él la toma por la cintura y le canta al oído: "Te desean, claro que sí te desean / como yo te deseaba antes de que mía fueras".

UN CORAZON INDOMABLE

El "Sol de México" está libre, no guarda compromisos con nadie. Su última conquista fue la modelo norteamericana Brittny Gastineau (28), gran amiga de Paris Hilton y Kim Kardashian, con quien fue visto por primera vez en febrero de 2012. El romance terminó hace un mes, por decisión del cantante. Desde su círculo íntimo definen: "Brittny comenzó a exponer cada detalle de la relación en las redes sociales, mientras que él siempre fue muy celoso de su vida privada".

Luis Miguel siempre fue considerado un rompecorazones. Algunas de sus conquistas más famosas fueron la periodista Daisy Fuentes (45), la cantante pop Mariah Carey (42), la presentadora de noticias de origen cubano Myrka Dellanos (47) y la actriz mexicana Aracely Arámbula (37), con quien tuvo a sus hijos Miguel (5) y Daniel (3). En septiembre de 2011, "El Sol" reconoció "formalmente" un secreto que todo México conocía: que Michelle Salas (23) era su hija, fruto de una relación fugaz con la socialité Stephanie Salas. Desde entonces, padre e hija forjaron una gran relación. Fue justamente Michelle quien lo acompañó durante su primera salida pública con Lucila…

CANCION DE AMOR EN LAS VEGAS

En enero de 2012, ¡Hola! Argentina entrevistó a Lucila y a su hija Camila en Punta del Este. Hablaron de su vida en Hollywood y su estrecha relación como madre e hija. Cuando el periodista reparó en ciertas coincidencias, Camila se apuró en aclarar: "No sigo los pasos de mi mamá… ¡Yo puedo cantar y ella no!". Por eso sorprendió ver a Lucila sobre el escenario del salón Colosseum, en el Ceasars Palace de Las Vegas, como una de las coristas de Luis Miguel. El 13 de septiembre, "El Sol" le dio la espalda a su público durante algunos segundos para dedicarle sus versos más románticos: "Eres mi bien / lo que me tiene extasiado / por qué negar/ que estoy de ti enamorado / de tu dulce alma / que es toda sentimiento. / De esos ojazos negros / de un raro fulgor / que me dominan / e incitan al amor; / eres un encanto, / eres mi ilusión". Son las primeras estrofas de "La gloria eres tú", el bolero del cubano José Antonio Méndez, y toda la escena fue registrada por la televisión.

El domingo 16, Luis Miguel y Lucila tuvieron su primera cita "en público". No es un gesto habitual para el cantante, quien mil veces declaró su fobia a los fotógrafos y curiosos. Después de comer, salieron del restaurante tomados del brazo. Muy sonrientes, felices. Michelle Salas caminó detrás de la pareja, junto a los custodios. Durante algunos minutos, esperaron pacientes a que el valet parking les acercase su Bentley negro. Curiosamente, se trata del mismo auto que usaron en 2008, cuando fueron fotografiados juntos por primera vez. Pero en esta ocasión, Luis Miguel y Lucila no se escondieron. Todas las pistas confluyen en una misma idea: el gran romance del año.