El comerciante había decidido congelar los precios de los productos de su librería.
Gabriel Barrios, un comerciante de Neuquén que se hizo conocido por un spot del "Fútbol Para Todos" en el que contaba a grades rasgos su decisión de mantener los precios de su local congelados, se vio obligador a cerrar su librería.
Dos años después de aquella firme decisión, tuvo que terminar con el negocio porque el sistema de precios sin subas "porque sí" no le estaba siendo rentable. Cuenta que hizo todo lo posible por sacar el comercio adelante, pero que no lo logró.
Según cuenta, los políticos que en aquel momento se le acercaron para felicitarlo ahora "le soltaron la mano", ya que no logró conseguir ayuda de ninguno de ellos cuando fue a plantear el problema de ahogo económico que estaba atravesando.
"Tratamos de reubicarnos en otros lugares, pero la verdad es que los alquileres están imposibles. Venimos desde hace meses, antes de las fiestas, tratando de conseguir una ayuda, golpeamos puertas, se nos ha hecho muy difícil", explicó en diálogo con el diario Río Negro.
De todas formas, Gabriel sigue insistiendo que la manera por la que optó hace dos años es la correcta y que no quiere convertirse nunca "en un tirano de los precios". "Yo voy a morir en la mía. Si consigo otro lugar dónde seguir trabajando voy a seguir trabajando con la misma política", concluyó.