La rebelión tuvo lugar en la cárcel de la ciudad de Parintins y dejó un saldo total de dos muertos. En el debate presidencial, Dilma Rousseff calificó de "barbarie" la situación del sistema penitenciario.
Un preso fue decapitado este lunes en un motín en una cárcel de la ciudad brasileña de Parintins, en el estado de Amazonas (norte), informaron fuentes oficiales.
El motín estalló por la mañana en la cárcel de Parintins, ciudad a cerca de 370 kilómetros de Manaos, capital regional, por una pelea entre presos, según informó la Policía Militarizada de Amazonas.
La cabeza del interno asesinado, Anibal Silva, fue lanzada a la calle por encima del muro de la prisión, donde se viven cerca de 155 reclusos. Otro, Paul Eliezer, fue apuñalado.
Durante la revuelta, la Policía acordonó la cárcel, de donde habían salido todos los agentes penitenciarios y también un grupo de presos que no quiso participar en el motín.
La situación en las cárceles brasileñas, donde se registran habituales motines y son comunes los problemas de hacinamiento e insalubridad, fue tratado este lunes en el debate entre los candidatos a la Presidencia de Brasil en las elecciones del próximo 5 de octubre.
La actual mandataria y candidata a la reelección, Dilma Rousseff, calificó la situación en las cárceles brasileñas como una "barbarie", durante una intervención en el debate organizado por la televisión SBT.