La cantante se atrevió a mostrarse como femme fatal a un año de haberse casado con Luis González.
El retiro de Vanesa Carbone (31) de los primeros planos mediáticos coincidió con el tiempo en que lleva enamorada de Luis González (30), aunque él no le haya exigido ningún cambio rotundo de vida. Por el contrario, el músico que conquistó a la vedette en pleno Fort Night Show fue el impulsor de su incipiente y flamante carrera como cantante solista.
Como si hiciera falta que Carbone haga una muestra de carácter, celebró el primer año de casada con un regreso triunfal como modelo con una producción de fotos en hilo dental para la revista Paparazzi. "Para mí el baño mata a las parejas, así que le dije que el día que nos mudemos quiero una casa con dos baños, uno para cada uno. En mi cuarto monté un dressoire para no estar dos horas en el baño, y se lo dejo a él mientras hago lo mío".
Por otra parte, reconoce que la pasión también es fundamental para mantener la armonía conyugal: "Como pareja nos divertimos mucho, tenemos imaginación, y Lucho me sorprende siempre con algo. Me regala conjuntos de lencería, por ejemplo. Cuidamos bastante la intimidad, estamos muy pendientes de no achancharnos en ese aspecto. Nos planteamos el hecho de ser papás, tenemos muchas ganas".