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Karina Jelinek: "Soy ratonera, me encanta"

Con ella cualquier hombre perdería el criterio. Pero dice que sigue sin suerte en el amor: a pesar de todos los rumores que la vincularon a Luis Miguel, ella cuenta que "mi corazón sigue solito, esperando que alguien lo ocupe".

31/07/2017

Es una de las mujeres que no pasan de moda. Una de las pocas que con los años, sorpresivamente, desafiando el paso del tiempo, levantan más suspiros que en sus comienzos. Pasan los años, siguen apareciendo presuntas modelos a quedarse con su lugar, pero ninguna logra destronarla. Sacarla de su sitio. Consciente de esto, sale a caminar por la vida con los tacos puestos y la frente en alto. Con la intención de alejarse del intenso frío que azota a Buenos Aires, Karina Jelinek (37) armó las valijas y partió rumbo a Miami, su lugar en el mundo, y donde también su belleza y sus encantos dejan con la boca abierta a más de uno.

Pero como no todo es playa, spa y descanso, la morocha aprovechó para sacarle el jugo al viaje. Lo primero que hizo fue realizar la campaña gráfica de la colección Cápsula de edición limitada, de trajes de baño, bodies y batas, que realizó con su amiga y socia Candela Devoto. Son diseños personalizados que se realizan a medida. Kari está muy entusiasmada con este proyecto y no duda un segundo en ponerle el cuerpo al desafío. Allí, Jelinek, fiel a su costumbre, atenta a lo que genera, desplegó todo su esplendor ante la cámara.

“Para realizar el body con mi nombre me inspiré en una página de Victoria’s Secret, donde las modelos tenían sus mallas con sus nombres… y se me ocurrió y le dije a mi amiga ‘¿Por qué no me hacés una malla con el nombre Olga?’, ya que me gastaron tanto…”. No sólo de su lomazo hace gala… también de su ingenio para ver el negocio. ¡Aunque no parezca! Curvas de ensueño y una figura que con el tiempo está más marcada. Aprovechando la cantidad de amigos que tiene en Estados Unidos, se hizo tiempo para todos. Por un lado, asistió al cumpleaños de Ignacio Palacios, dueño de Top Miami Rental.

Allí, el hombre la invitó a navegar en su yate y la modelo aceptó encantada. Por otro lado, apareció en escena el cantante Luis Miguel. Mientras todos la relacionan con el mexicano, ella no se hace la desentendida. “A Luismi lo conozco hace nueve años. Y si bien me invitó a salir varias veces, no acepté nunca porque cada vez que lo hacía estaba en pareja. Hace unos días me lo crucé en la pileta del hotel en el que estaba yo en Miami, y nos pusimos a charlar. Estaba toda traspirada, con un vestido amarillo. ¡Un horror! Al principio no me di cuenta que era él porque está diferente. Está mucho mejor y más flaco. Lo vi bien. fuimos a tomar un agua de coco a la barra de la pileta… estaba impecable, con su sonrisa, su perfume”, detalló.

Luego de ese encuentro, se pasaron los números de teléfono y acordaron verse al otro día. Fueron a comer juntos al restaurante del hotel. Ella llegó 40 minutos tarde, y él estaba ahí, firme. Esperándola. El dato más curioso es que pese a que ella es vegetariana, todos los platos que probó tenían carne. Más allá de este cruce, con tintes tan románticos y que cualquiera se animaría a rotular como el romance del año, según ella no es tal. Parece que la morocha sigue siendo la soltera más codiciada.

En la búsqueda. “Hoy mi corazón está solo más allá de los romances que me inventan”, se defiende. Desde su frustrado y tan comentado romance con el político Albi Czernikowski, no volvió a enamorarse pese a que los candidatos a conquistarla hacen fila y esperan su oportunidad. Seguramente, la mayoría de ellos está haciendo mal los deberes. Karina tiene sus requisitos a la hora de buscar novio. Señor empresario, prepare lápiz y papel, y anote: “Me gusta el hombre que tiene mucha actitud, que no se me tire encima, como diciendo que me tiene ahí… me gusta el que es más recatado. Eso me seduce más”.

Por otro lado, como digna ariana, también tiene secretos, que comparte con sus seguidoras para que los empleen como arma de seducción. “Si bien no me considero una bomba sexual, tengo lo mío. Eso de bomba sexual no va conmigo. Si hay que buscar un término, me gusta más ratonear. Me encanta y me hago cargo de eso. Soy de Aries y fuego… ya con eso te digo todo. ¡Enciendo la chimenea! Todo tiene que ver con la actitud. Yo en este momento estoy sola, pero sigo siendo una mujer en la vida, sigo teniendo el mismo espíritu”.