La modelo y actriz habló por primera vez del triste momento y contó cómo lo superó.
A los 27 años la vida le puso a la actriz Liz Solari una prueba muy difícil: recuperarse de la muerte de su novio, Leonardo Jesús Verhagen, quien falleció en sus brazos de un paro cardíaco. Hoy, siete años más tarde, ella lo logró y por primera vez contó cómo fue transitar aquel dolor. “La meditación fue un proceso que cambió mi vida para siempre y hoy te puedo decir que para mí meditar es una práctica cotidiana que vivo con total naturalidad. Me gustó la idea de abrir mi propio canal para compartir mi experiencia y generar, tal vez, una cadena de conciencia por un mundo más amable, compasivo y amoroso”, le contó a Para Ti.
“La vida nos presenta experiencias para evolucionar. Tenemos que elegir con sabiduría y responsabilidad lo que hacemos con esos desafíos. Si no conocemos el dolor, ¿cómo podemos conocer la felicidad? Si no conocemos la oscuridad, ¿cómo sabemos qué es la luz? Necesitamos transitar experiencias de toda índole –hasta dolorosas y traumáticas– para valorar más profundamente la vida. Para despertar. Eso fue lo que me pasó a mí”, continuó la muchacha que a la par de la meditación conoció el veganismo.
Hoy, su vida cambió. Seis meses al año está radicada en Roma, donde vive con su pareja. “¡Me cuesta hablar de mi intimidad! Pero bueno, sí, estoy de novia con un italiano que se llama Walter y somos muy felices", reveló.
La bella rubia contó que cuando está lejos extraña mucho a su familia. “Soy súper familiera y extraño mucho no poder tomarme unos mates con mis viejos. Por eso ahora que me quedo varios meses en la Argentina porque me ofrecieron un personaje hermoso en una miniserie que comienzo a filmar con Story Lab pienso ir muy seguido a Rosario a visitarlos”, adelantó emocionada.
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