El mandatario dijo que la grabación de sus conversaciones telefónicas discutiendo pagos es "totalmente inaudita y quizás ilegal".
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó este sábado que la grabación de sus conversaciones telefónicas privadas por su exabogado personal es "totalmente inaudita y quizás ilegal".
Así respondió el mandatario a la revelación de que el letrado, Michael Cohen, grabó en secreto una discusión que sostuvo sobre un posible pago a Karen McDougal, una exmodelo de Playboy con quien habría tenido una aventura. Esa conversación ocurrió semanas antes de la victoria de Trump en las elecciones de noviembre de 2016.
"Inconcebible que el Gobierno irrumpa en el despacho de un abogado (temprano en la mañana), casi inaudito. Aún más inconcebible es que un abogado grabara a un cliente, totalmente inaudito y tal vez ilegal. ¡La buena noticia es que su presidente favorito no hizo nada malo!", escribió Trump en su cuenta de Twitter.
La grabación forma parte de los documentos y archivos electrónicos incautados por el FBI en la oficina del exabogado del presidente hace unos meses. Desde entonces, Cohen se ha distanciado públicamente del mandatario y continúa bajo investigación por parte del gobierno federal.
El Departamento de Justicia está investigando la participación de Cohen en el pago a mujeres para aplacar los escándalos sobre Trump en los medios antes de las elecciones de 2016.
Los fiscales quieren saber si eso violó las leyes federales de financiamiento de campaña, y cualquier conversación con Trump sobre esos pagos sería "de gran interés" para ellos.