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Qué son las Leliq, la herramienta para controlar la cantidad de pesos en circulación

El Banco Central apuesta a las Letras de Liquidez para absorber pesos del mercado. Cómo funcionan y qué efecto tienen en la economía.

03/10/2018

Las Letras de Liquidez (Leliq) son un instrumento clave con el que el Banco Central (BCRA) intentará llevar adelante su nueva política monetaria, que tiene como fin retirar dinero de la economía para contener así la demanda de dólares. El objetivo es controlar al tipo de cambio para frenar también a la inflación.

Las Leliq son títulos emitidos por el BCRA. Están nominados en pesos, tienen un plazo de siete días y se licitan diariamente. Son instrumentos de control monetario: al emitir estas letras, el BCRA capta pesos que salen de circulación.

A diferencia de la licitación de las Letras del Banco Central (Lebac), que estaban abiertas a cualquier ahorrista -individuos, empresas, entidades gubernamentales y fondos de inversión-, las Leliq solo pueden ser operadas por los bancos. Según explicó el titular de la entidad, Guido Sandleris, el objetivo es que el BCRA vuelva a relacionarse exclusivamente con las entidades bancarias.

Cómo funcionan las Leliq

A las 14.15 comienza la licitación, y se abre el plazo para que los bancos realicen sus propuestas. Entre las 14.30 y las 14.45, se anuncia a las entidades el resultado: cuántos pesos retiró el Banco Central, la tasa promedio y la tasa máxima.

Qué efecto tiene en la economía

El BCRA además aumentó al 44% los encajes bancarios -la porción de dinero captado de terceros que deben mantener inmovilizado los bancos- y habilitó a las entidades a que integren esa porción de dinero en Leliq. Los bancos, a su vez, pueden aumentar las tasas que pagan por los depósitos a plazos fijos para tener más pesos para invertir en las letras de liquidez.

Al costo de altas tasas de interés, las Leliq permiten al BCRA retirar pesos de la economía. La contracara de esta política es un enfriamiento de la economía, ya que pedir dinero prestado es muy costoso y eso complica el inicio de proyectos nuevos o inversiones, además de generar dificultades para aquellas empresas que deben refinanciar deudas.


Fuente: La Nación