Santiago del Estero, Sábado 04
Mayo de 2024
X
Mundo

El príncipe heredero Mohamed bin Salman ordenó silenciar disidentes

El poderoso príncipe heredero de Arabia Saudita aprobó un equipo que se dedicaba a secuestrar y torturar disidentes. Informes de inteligencia clasificados.

18/03/2019

Más de un año antes del asesinato del periodista Jamal Khashoggi, el poderoso príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohammed bin Salman, aprobó una campaña secreta para silenciar a los disidentes que incluyó secuestros y torturas, según informó el domingo el diario The New York Times en base a fuentes de inteligencia de EEUU.

Las operaciones clandestinas autorizadas por el monarca constaban de la vigilancia, el secuestro, la detención y tortura de sauditas, señala el reporte, que cita a funcionarios estadounidenses que accedieron a informes de inteligencia clasificados. Las fuentes indicaron que el monarca creó para estos efectos un "Grupo de Intervención Rápida", dijo el Times.

Al menos algunas de las misiones clandestinas fueron llevadas a cabo por miembros del equipo que mató y desmembró a Khashoggi en octubre en el consulado de Arabia Saudita en Estambul, lo que sugiere que su asesinato fue parte de una campaña más amplia contra los disidentes, destaca la información, que cita a los funcionarios y a allegados a las víctimas sauditas.

Entre ellas, operaciones de repatriación forzosa de países árabes, torturas en palacios del príncipe y de su padre el rey Salman, según dichas fuentes.

Fueron tantas las operaciones, que el diario asegura que uno de sus miembros responsables del equipo reclamó al príncipe heredero una retribución especial como bonus para celebrar la fiesta del "Aid al-Fitr", el final del ramadán.

Una profesora de lingüística saudita que había escrito un blog sobre la mujer en su país se intentó suicidar después de las torturas psicológicas sufridas, según los informes del servicio de espionaje estadounidense.

El asesinato de Khashoggi, que fuera columnista del diario The Washington Post, generó una ola de protestas en el mundo, incluyendo una declaración del Senado de Estados Unidos pidiendo al presidente Donald Trump que identificara y castigara a los responsables.

Los legisladores, que recibieron informes de los jefes de las agencias de inteligencia estadounidense, dijeron estar convencidos de que el príncipe Mohamed era responsable del asesinato de Khashoggi.