Un profesional de la psicología hizo un análisis del violento episodio en Villa Gesell en el que murió un joven de 19 años. Remarcó la importancia de revisar cada caso y no estigmatizar el deporte.
Días atrás en la ciudad de Villa Gesell se produjo una violenta pelea a la salida de un boliche, en el que un grupo de al menos 10 jóvenes atacaron salvajemente a un joven de 19 años, provocándole la muerte.
Desde que se conoció la noticia, la opinión generalizada castigó duramente a los agresores ligando su comportamiento violento con la práctica del rugby, dado que todos son compañeros de un equipo de éste deporte.
Dada la situación, Noticiero 7 habló con el licenciado en psicología Leandro Peiretti, quién remarcó la importancia no de generalizar conceptos desde las primeras instancias, sin antes analizar cada caso.
“Es importante analizar el caso revisando todas las partes. Cuando Sigmound Freud habla de la psicología de las masas y análisis del Yo explica como muchas veces la voluntad individual queda absorbida por el grupo o la voluntad de la mayoría”, señaló Peiretti.
También remarcó que “tiene mucho que ver la edad de los protagonistas de este caso. Según los últimos avances de la neuropsicología la última maduración del cerebro es después de los 24 años de edad, donde lo que madura es el lóbulo frontal, que es la parte que controla las conductas y los frenos inhibitorios, pero muchas veces las personas no son capaces de controlar sus conductas”.
Al ser consultado sobre la relación que este hecho pueda tener con la práctica del rugby, el licenciado en psicología destacó: “no hay que responsabilizar solo a los entrenadores. Es un tema que compete también a la escuela, a la educación de la casa. Que el rugby sea un deporte de contacto y de tácticas violentas durante el juego, no implica que un jugador mantenga reacciones violentas fuera de un partido. Un rugbista es rugbista mientras juega un partido dentro de una cancha. Cuando termina tiene que comportarse como una persona de bien”.
“Este proceso jurídico está comenzando. Seguramente, durante la investigación se van a ordenar las pericias psicológicas de cada uno de los involucrados, para ver caso por caso cuál cómo interpretan esto subjetivamente y qué personalidad tiene cada uno de ellos”, aseguró el profesional.