Samira, de 29 años, junto a sus hermanos, fueron víctimas de una patota que intentó robarles el auto a las afueras del lugar. Ella recibió la peor parte y todo quedó grabado. ¡Mirá!
Una joven de 29 años fue salvajemente agredida cuando salía de festejar su cumpleaños en un conocido boliche de Godoy Cruz, en Mendoza.
El violento episodio ocurrió en la madrugada del domingo a metros del boliche Iskra, donde fueron a celebrar la chica junto a sus hermanos y un grupo de amigos.
A la salida, fueron a buscar el auto estacionado a una cuadra y notaron que había un grupo de jóvenes forzando una puerta y que estaban intentando robarlo.
En ese momento, se desató una fuerte discusión que escaló rápidamente en un ataque. “Mis hijos buscaban que se alejaran del auto, pero los empezaron a insultar y se defendieron. Rodeaban al coche, cuando mi hijo se acercó para subir, se dio cuenta de que la puerta había sido forzada. Ahí empezaron a buscarle pelea”, contó Hugo, padre de los jóvenes agredidos, en declaraciones a Mendoza Online.
Asimismo, detalló que las personas que los agredieron “eran una patota importante”. Los tres hermanos fueron golpeados, pero Samira -la cumpleañera- se llevó la peor parte: uno de los agresores la noqueó de una brutal trompada.
“A ese grupo se les sumó un auto blanco que paró y se bajaron más pibes. Ahí la pelea se hizo muy desigual. Mis hijas intentaron separar porque empezaron a patear el auto y a tirarle piedras. Uno de los pibes, le pegó una piña que la desmayó”, contó.
El tenso momento quedó registrado en un video que grabó una joven que iba en un auto y frenó al ver lo que sucedía. En las imágenes se ven la trompada que recibe Samira y cómo cayó desvanecida al piso.
En esa línea, el padre indicó: “Cuando llegué al lugar ya estaba la ambulancia y había dos patrulleros. El tema es que, por el momento, la Policía no puede hacer nada. Yo creo que con el video que les pasé los tienen que encontrar, porque se ven perfectamente, igual que el auto blanco”.
La víctima tuvo que ser trasladada de urgencia a un centro asistencial. Según señaló el padre, presenta problemas auditivos que deberán ser tratados con un especialista y que tiene problemas para comer porque “le afectó la mandíbula”.
Por lo pronto, las víctimas ya realizaron la denuncia judicial, pero hasta el momento no lograron identificar a ninguno de los agresores.