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Revista

Crece la demanda de cucarachas gourmet en China

La cucaracha americana es una de las variedades más extendidas. La consumen por sus supuestas propiedades contra las úlceras y los problemas respiratorios.

18/04/2019

Es una escena digna de una película de horror: en un criadero del sudoeste de China, 10 millones de cucarachas de bandas marrones se agitan en la oscuridad. Acabarán como manjar.

Li Bingcai, agricultor de la provincia de Sichuan, cuida a sus criaturas de seis patas. Las alimenta a diario y viven en placas de madera verticales, desde donde emiten en coro un sonido estridente.

En este espacio, Li acaba cubierto de insectos, que llegan hasta sus mejillas. El no parece intimidado. Ni él ni otros criadores que decidieron probar suerte en esta actividad.

Venden las cucarachas a la industria farmacéutica tradicional para la elaboración de medicamentos. Pero Li Bingcai también las cría para el paladar. Junto a su granja, varios restaurantes las sirven salteadas con pimiento, una especialidad de Sichuan, a gourmets. Mañana habrá cucaracha laqueada.

"A la gente le cuesta imaginarse lo delicioso que está. Hasta que prueba", explica el criador, que se lleva un insecto vivo a la boca, lo mastica y se lo traga.

La cucaracha americana (Periplaneta americana) es una de las variedades más extendidas. La consumen por sus supuestas propiedades contra las úlceras y los problemas respiratorios, o como simple vigorizante. "Estos bichos tienen un sistema inmunitario muy desarrollado. Las personas pueden obtener beneficios si los consumen", asegura Li Bingcai.

Su granja se encuentra en una casa antigua rodeada de campos en Yibin, una región montañosa cubierta de bosques de bambúes. La sala dedicada a la cría, del tamaño de un terreno de bádminton, tiene ventanas con una rejilla para prevenir la fuga de los intentos. La seguridad es prioritaria. En 2013 un millón de cucarachas se escaparon de un vivero de la provincia de Jiangsu, en el este del país.

Las de Li viven en un espacio idóneo para su crecimiento, con una temperatura de 28 grados y mucha humedad. El lugar desprende un olor a ropa mojada.

La llegada diaria de comida provoca un auténtico frenesí entre los insectos. Cuando Li Bingcai coloca sobre unas bandejas una mezcla de maíz en polvo, fruta y corteza de verduras, las cucarachas se abalanzan, trepando las unas sobre las otras. "Las alimentamos en un entorno en el que la higiene está garantizada. Comen alimentos de verdad, nada artificial", explica.

Regularmente coloca a parte de sus pensionistas en agua hirviendo, antes de deshidratar el armazón. El año pasado vendió una tonelada a una empresa farmacéutica por un total de 90.000 yuanes (14.000 dólares).

Li Bingcai era dueño de una tienda de teléfonos móviles cuando, en 2016, se le ocurrió la idea de lanzarse en el negocio de las cucarachas por el bajo costo de producción y la sencillez de la técnica de cría de estos insectos muy prolíficos.

Vende la mayor parte de su producción a través de internet. Medio kilo de insectos deshidratados vale entre 100 y 600 yuanes (de 14,5 a 89 dólares).

En la vecina ciudad de Xichang, un grupo farmacéutico chino creó el centro de producción de cucarachas más grande del mundo: cría 6.000 millones de insectos y los vigila con un dispositivo de inteligencia artificial.

La mención de las cucarachas aparece en escritos de medicina tradicional china desde el siglo XVI, en el "Bencao gangmu", un compendio de referencia sobre las propiedades medicinales de las plantas, animales y minerales.

Las cucarachas tienen propiedades depurativas y diuréticas, afirma Liu Daoyuan, profesor del centro médico Yongshou, en Yinchuan, al norte de China. "También es eficaz para aliviar los dolores de garganta, las anginas o las cirrosis hepáticas", afirma. Otros expertos de medicina china recalcan que la cría de cucarachas no está regulada por normas estrictas, lo que posibilita efectos indeseables.

Li Bingcai sueña con convencer a sus contemporáneos de que coman cucarachas. Para ello colabora con un restaurante local.

Llegan habitantes de la región para probar los insectos, atraídos por la publicidad positiva en torno a sus supuestos beneficios, explica el jefe del establecimiento, Fu Youqiang. Cocina hasta 30 platos de cucarachas por mes.

Fuente: diario Clarín.