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País

¿Qué esconde el llanto de Mauricio Macri en el Teatro Colón?

Medios nacionales analizaron la emoción del presidente en la gala del viernes a la noche en la cumbre del G20.

01/12/2018

El presidente Mauricio Macri lloró en la gala del Teatro Colón, la noche del último viernes. Y fue la imagen que recorrió todos los portales y medios del país.

Muchos expertos analizaron el gesto del presidente argentino, y aseguran que fue un desahogo por este último año y medio de tropiezos y crisis que vivió su gobierno.

“En ese llanto, dicen, estuvo el año y medio de tensión por la organización de la Cumbre del G20. Estuvo la acumulación de malas noticias económicas de los últimos meses. La angustia por el fracaso del River-Boca. Y hasta la ansiedad por la demora con la que, este viernes mismo a la mañana, Donald Trump arribó a la bilateral en la Casa Rosada”, sostiene el periodista Santiago Fioriti, que cubre Política para el diario Clarín.

Uno de los funcionarios que mejor suele retratar el estado espiritual de Mauricio Macri dijo: “Ese llanto explica un poco todo eso. Fue un desahogo de una persona normal”.


Funcionarios, allegados y asesores, recibieron mensajes para Macri de muchas personalidades, en las que lo impulsaban a no bajar la guardia, y felicitaban al presidente por la organización de la cumbre del G20. En estos días el país recibió a los líderes más importantes del mundo: el 80% del Producto Bruto Interno del planeta están en Buenos Aires. Algo inédito en 200 años de historia del país.

“¿Cristina organizaría algo así?”, se preguntó con suspicacias un periodista en Twitter. En el entorno de Macri tomaron nota rápido del rebote que tuvo el hecho en las redes sociales. A las 21.10, en la cuenta presidencial de Twitter se publicó el video con un tuit escrito en mayúsculas: “Orgulloso de la Argentina y de los argentinos”.

¿Y la emoción de Macri? Para Ricky Pashkus, director del espectáculo Argentum, lo de Macri fue un desahogo: "Tengo la sensación de que para el Presidente este evento del Colón era muy importante: era invitarlos (por los mandatarios) a su país, a su casa más intima. Y también era una necesidad honesta de mostrar algo que él intuía: necesitaba ser aceptado y comprendido en que algo que él quería transmitir. Fue el alivio lo que lo hizo llorar. 100 jóvenes gritando '¡Argentina, Argentina!' le hizo sentir que algo estaba sucediendo allí tenía impacto, y no solo a nivel político".

"Macri entendió que la cultura es lo único que hace que sea posible, que une une, aún en semejante momento, cuando se habla de grieta y demás —sostuvo Pashkus—. Porque los que gritaron '¡Argentina, Argentina!', no son de un partido político. Son artistas".

A muchos no les impactó el llano. La inflación sigue acechando el bolsillo de los argentinos. El desempleo va en aumento y de consumo ni hablar. “¿Qué nos deja este G20?”, pregunta un experto en política. Seguro que dinero no. Los gastos en la organización de la cumbre ascendieron a los 112 millones de dólares. Lo que sí queda son las reuniones de Macri y Dujovne con los líderes globales, donde, se deduce, pidieron ayuda para atravesar el temporal.