Julieta se reencontró con sus abuelos en la casa de Gran Hermano y no pudo contener las lágrimas de emoción.
Luego de su exitosísimo paso por la casa de Gran Hermano, Julieta Poggio se quedó con el tercer lugar del certámen y a días de haber finalizado la participación en el ciclo que condujo Santiago Del Moro, la jóven recibió una visita más que especial.
En la invitación que tuvo en A La Barbarrossa, el programa de Georgina Barbarrossa y en el que los panelistas simulares un “pijama party”, Julieta contó cómo fue la participación que tuvo en la casa más famosa del país, la cuál duró un poco más de cinco meses.
Sin embargo, luego de hacer un repaso de sus días en el reality, la conductora del programa le dijo que llegó el momento de una grata sorpresa, porque por la puerta de la casa, ingresarían los abuelos de la nacida en Villa Devoto.
Fue allí que cuando la hermanita los vio atravesar el pasillo celeste, salió disparada desde el sillón con algunas lágrimas en sus ojos: “Ay no, no. Es la primera vez que los veo”. exclamó.
“¡Los amo! No pueden ser más lindos los dos. Estoy re contenta de verlos. Están en la casa abus”, dijo Julieta mientras los abrazaba incansablemente luego de haber estado asilada durante 162 días desde el 17 de octubre del 2022.
En ese momento, Georgina Barbarrossa se sumó a la cataráta de emociones y elogió a los abuelos de la tercera finalista: “Pero mirá qué guapos. Que divina”, soltó la conductora mientras recorrían la casa.