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Mayo de 2024
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Hallaron esqueletos en una antigua base ocupada por Hitler y tropas nazis en Polonia

Misterio. Los científicos analizaron los restos, que estaban demasiado deteriorados para determinar quiénes eran y cómo murieron en Wolf’s Lair.

07/05/2024

Los fiscales polacos finalizaron una investigación sobre esqueletos humanos encontrados en un sitio donde el dictador alemán Adolf Hitler y otros líderes nazis pasaron un tiempo durante la Segunda Guerra Mundial porque su avanzado deterioro hizo imposible determinar la causa de la muerte, dijo un portavoz este lunes.

Los restos fueron encontrados el 24 de febrero en Wolf’s Lair, que sirvió como cuartel general principal de Hitler entre 1941 y 1944, cuando el área era parte de Alemania. El complejo de unos 200 búnkeres nazis y cuarteles militares escondidos en espesos bosques fue el lugar del fallido intento de asesinato de Hitler por parte del coronel Claus Stauffenberg el 20 de julio de 1944. El sitio es ahora una atracción turística.

El portavoz de la fiscalía de la cercana ciudad de Ketrzyn, Daniel Brodowski, dijo que los agentes de policía aseguraron los restos después de que fueron encontrados por un grupo local, Latebra, que busca objetos históricos.

Un perito médico forense los examinó bajo la supervisión de la fiscalía, que intentaba determinar si se había producido un homicidio involuntario. Interrumpió la investigación a finales de marzo debido a la falta de pruebas de que se había cometido un delito, dijo Brodowski a The Associated Press en un comunicado enviado por correo electrónico.


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“El experto afirmó que los restos óseos conservados eran de origen humano y provenían de al menos cuatro personas, tres de las cuales probablemente eran hombres de mediana edad, y el cuarto era un niño de varios años cuyo sexo no se puede determinar”, Brodowski escribió.

Pero debido al avanzado deterioro de los restos, ya no fue posible determinar la causa de la muerte, dijo, señalando que habían pasado al menos varias decenas de años.

La investigación no abordó quiénes podrían haber sido las personas, debido al estado de los restos y al paso del tiempo.

La casa de Goering

Un equipo de historiadores y arqueólogos germano-polacos aficionados han descubierto por casualidad los restos de cinco personas, entre ellas un recién nacido, durante unas excavaciones en la antigua casa del mariscal del Tercer Reich Hermann Goering, informó el semanario ‘Der Spiegel’.


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A todos los cuerpos les faltaban manos y pies, de acuerdo con este medio, que recalca que el antiguo cuartel general nazi, “sigue siendo un lugar terrorífico y tenebroso”.

Está situado en medio de un páramo boscoso y consta de enormes búnkeres y restos de edificios, ahora cubiertos de musgo, que atraen a más de 200.000 turistas cada año.

"Nos quedamos completamente sorprendidos”, afirmó Oktavian Bartoszewski, que publica la revista ‘Reliquias de la Historia’, muy popular entre buscadores de tesoros y exploradores en Alemania.

Bartoszewski y sus colegas llevan años trabajando con la organización de investigación ‘Fundacja Latebra’ en el terreno del antiguo cuartel general nazi.

Durante sus visitas, el equipo germano-polaco se topó repetidamente con objetos de los nazis, entre ellos vajillas, herramientas y otras pertenencias personales.

Las ruinas de la casa de Goering se consideraban investigadas a fondo, pero uno de los investigadores, Jens Hfalek, observó indicios de un antiguo suelo de madera y empezó a excavar.

El grupo encontró tuberías de agua y un fragmento de cráneo humano a unos diez centímetros bajo tierra.

El equipo detuvo el trabajo e informó a la policía, pero cuando siguió excavando encontró los restos de cinco personas.

Según los forenses, tres adultos, un adolescente y un bebé. Es posible que fuera una familia la que estuviera enterrada bajo tierra en la casa de Goering, indica el medio alemán.

Según Bartoszewski, es probable que los cuerpos fueran arrojados después de la construcción de la casa.

”Los que colocaron las tuberías deberían haber descubierto los restos humanos”, afirmó. Incluso es posible que Goering supiera de la existencia de los muertos.

Sin embargo, también es posible que los cuerpos no fueran enterrados hasta el final de la Segunda Guerra Mundial o que fueran víctimas de un asesinato que no tuviera nada que ver con los nazis.