Se pueden sumar a algún batido o yogur o a un pancake de avena para tener un plus de vitaminas.
El lino era hasta no hace mucho tiempo solo un tejido con el que se confeccionan prendas ideales para el verano, mientras que en los herbolarios se podían encontrar suplementos de linaza, que estaban indicados para combatir el estreñimiento, pero, desde hace unos años, las propiedades saludables de estas semillas salieron a la luz y se abrió un hueco en la despensa de los amantes de la alimentación orgánica y natural.
Ahora, algo tan sencillo como añadir una cucharada de semillas de lino molidas al desayuno puede brindarnos distintos beneficios y no solo para la digestión. “Estas semillas, también conocidas como linaza, proceden de la planta Linum usitatissimum”, explica la dietista-nutricionista española Belén Rodríguez, quien destaca que sus propiedades fueron conocidas y utilizadas por la humanidad durante miles de años.
La especialista dijo que se cree que el lino se comenzó a cultivar en la Mesopotamia asiática alrededor del 3.000 a.C, tanto para la producción de lino como para la alimentación. También la utilizaban los antiguos egipcios, e Hipócrates recomendaba su uso para tratar problemas digestivos alrededor del 650 a.C”.
Con respecto a su popularidad actual, la experta señala que, en las últimas décadas hubo un aumento significativo en la investigación científica que respalda los beneficios para la salud de las semillas de lino y que demostró sus efectos positivos sobre la salud cardiovascular, la digestión, el control del azúcar en sangre y la prevención de enfermedades crónicas. Asimismo, también influyeron en los movimientos en favor de una alimentación más saludable y natural, así como de las dietas veganas y vegetarianas.
Los beneficios de añadir una cucharada de lino
Las semillas de lino se pueden consumir de múltiples maneras, ya que se trata de un ingrediente fácil de incorporar en una variedad de recetas, incluyendo panes y productos horneados. Pero también se pueden consumir en crudo añadiendo una cucharadita al yogur o batido o espolvoreándolas sobre el cereal o la avena. Los beneficios son los siguientes: