La mayoría presenta cuadros de intoxicación, pero también hay varias personas con quemaduras graves.
Mientras la ciudad de Santa María, en el sur de Brasil, amaneció en medio de la tristeza por la muerte de al menos 233 personas durante el incendio del boliche Kiss, las autoridades locales confirmaron que de un total de 112 heridos, 79 permanecen en cuidados intensivos debido a cuadros de intoxicación o quemaduras graves.
Lo informó el ministro brasileño de Salud, Alexandre Padilha, quien contó además que cerca del 80 por ciento de esos internados graves son pacientes que sufrieron una intoxicación al inhalar el humo del incendio de la discoteca ubicada en el estado de Río Grande do Sul, y el 20 por ciento restante son heridos con quemaduras graves.
Según el ministro, el total de heridos fue cifrado hoy en 112 en distintos hospitales de la zona informó la agencia EFE.
Cuarenta de ellos permanecen en hospitales de Santa María y 39 fueron trasladados a centros médicos de Porto Alegre, la capital regional, y ciudades de su región metropolitana, tres de ellos en las últimas horas.