Ocurrió durante la madrugada del martes, la situación fue descubierta por los pacientes que esperaban ser atendidos en un centro de salud de un barrio salteño. El ministro de salud salteño relativizó el episodio.
La realidad supera a la ficción. Durante la madrugada de ayer, en el Centro de Salud 27 del barrio Intersindical los pacientes que esperaban para obtener un turno descubrieron a una enfermera de la salita y a un médico del Samec teniendo relaciones sexuales.
El jefe del centro de salud, Mario Figueroa, calificó al hecho de “raro”, mientras que el ministro de Salud, Enrique Heredia, en declaraciones a los medios, relativizó el episodio diciendo que “no hay que bastardear”.
El escándalo que envolvió al centro de salud 27 de zona sur se dio a conocer luego de que una de las personas que había ocurrido a la salita, junto a otras más, escuchó gemidos que procedían de uno de los consultorios.
Aunque creyeron que eran gemidos de dolor, pronto identificaron que eran de placer.
Un hombre que estaba en la fila, al darse cuenta de la situación, forcejeó la puerta del consultorio hasta romperla y encontrar a las personas totalmente desnudas.
El jefe del Centro de Salud del barrio Intersindical, en diálogo con El Tribuno explicó que éste es un hecho “raro” y que se está investigando. Desconocía si se habían tomado medidas con la enfermera y al médico, porque ayer ella estaba de franco. Agregó que la directora de Primer Nivel de Atención, Viviana Molina, es quien debe tomar la decisión sobre las sanciones.
A pesar de que en los portales oficiales figuraba que habían despedido a la enfermera, personal de prensa del Ministerio de Salud informó a este medio que no hubo sanciones, que la investigación ya se había iniciado y que después de las conclusiones de ésta se podrían tomar medidas administrativas.
El jefe del Centro de Salud aseguró que la enfermera no estaba en horario de trabajo al momento de hecho y que había acudido a la guardia por un problema de salud.
Ratificó que existe una denuncia al Servicio de Emergencias 9-1-1.
Fuente: El Tribuno