La banda de Billie Joe Armstrong se presentó anoche en Vélez y enloqueció a su público con más de 3 horas de música en vivo, a pura emoción.
asaron siete años desde que Green Day pisó por última vez suelo argentino. Anoche, la banda conformada por Billie Joe Armstrong, Tré Cool y Mike Dirnt se subió al escenario montado en el estadio de Vélez Sarsfield, en una de las fechas más relevantes de la gira latinoamericana Revolution Radio Tour, que incluye shows en Brasil, Chile, Perú, Colombia y México.
Así partió el concierto de Green Day en Vélez #GreenDayARG pic.twitter.com/NqN0Q6kSrw
— #GREENDAYENCHILE (@greenday_chile) 11 de noviembre de 2017
La apertura del recital estuvo a cargo de dos bandas soporte: inauguraron la velada los rosarinos de Bulldog y continuaron The Interrupters, formación oriunda de Los Ángeles. En su primera visita al país, estos músicos llegaron con una sorpresa bajo el brazo, porque durante uno de sus temas fueron acompañados por la mítica voz de C. J. Ramone, emblema del punk.
A las 21.15, en los altoparlantes sonó Bohemian rhapsody e irrumpió en la escena un actor disfrazado de conejo, quien comenzó a entonar Hey ho, let’s go, de los Ramones.
Minutos después, el ambiente fue decorado por una extravagante pirotecnia y el trío Green Day abrió el show con Know your enemy. En ese instante, un fanático subió a las tarimas, entonó la letra y besó en la boca al cantante para luego arrojarse de cabeza al público.
Fiel a su estilo, la banda creó un clima intimista y, a través del excelente sonido del lugar, continuó con los hits Bang bang, Revolution radio y Holiday, como segundo, tercero y cuarto tema. En este contexto, Armstrong dedicó unas sentidas palabras a los presentes cuando dijo “esta es una noche de amor, de buena energía, de locura y celebración”.
Puede parecer una cosecha de algodón , pero no.
— Ye☆ (@Yekitak) 11 de noviembre de 2017
Es el show de Green Day. pic.twitter.com/lfRtX4C24Z
Luego, al borde del llanto, expresó que no quería más políticos mentirosos. Al finalizar sus palabras, dio inicio a Boulevard of broken dreams, mientras el público se mostraba conmovido.
Con el transcurso de la noche, el líder instó a ignorar las redes como Facebook e Instagram para “estar con toda la atención acá”. Al rato prosiguió con una de las nuevas creaciones y fue respaldado por otra seguidora que lo acompañó, quien además arrojó remeras y agua a la gente.
Fue un espectáculo potente de casi dos horas, que, si bien sirvió como excusa para presentar su reciente álbum, también incluyó dentro de su repertorio los clásicos de los 90 como American idiot, Dookie y Basket case.
Fuente: Diario Hoy