Hubo menos casos de urgencia. Por lesiones sufridas en derrapes, 16 personas fueron auxiliadas en el centro asistencial.
La lluvia parace haber jugado a favor de quienes trabajaron esta madrugada en el hospital Regional Ramón Carrillo. Es que, a diferencia de lo que ocurrió en la pasada fiesta de Navidad, se atendieron contados casos de urgencia: la mayoría fueron personas heridas al caer de sus motocicletas.
De acuerdo a lo informado desde el centro asistencial a DiarioPanorama.com, muchos de los heridos cayeron de sus motos por que se encontraban ebrios. “Ninguno de los casos fue de extrema gravedad”, confió la fuente consultada.
Dispuesto a trabajar como el pasado 25 de diciembre, el servicio de urgencias del Sease 107 estuvo atento a todo, aunque esta vez todo fue más tranquilo. “Fue una guardia distinta a la de Navidad”, sentenciaron.