Ya en los primeros minutos de este viernes y en vigencia la cuarentena obligatoria, el centro de Santiago del Estero mostraba calles desiertas, una inusual postal que se repetirá, con suerte, hasta el 31 de marzo.
El avance del coronavirus es tan rápido que el Presidente de la Nación debió declarar un "aislamiento social preventivo" desde la medianoche de este jueves y que se extenderá, con suerte, hasta el 31 de marzo.
Con suerte, porque si el próximo 31 de marzo se levanta la cuarentena, significará que la guerra contra este virus dio sus frutos y podremos volver a tratar de llevar una vida como la que conocíamos hasta hoy. Si no es así, quiere decir que los esfuerzos y sufrimientos se extenderán un tiempo más y que este virus, que se transformó en pandemia, sigue asolando por estas tierras.
A poco de entrar en vigor la cuarentena, las calles de la ciudad quedaron desiertas. Salvo algún que otro vehículo, algún descuidado o un trabajador que regresaba a su casa, no se veía a nadie más transitar la ciudad.

Una postal inusual para un jueves a la noche en Santiago.
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Tal vez una escena que se repite en toda la provincia y en todo el país.