La actriz falleció este viernes en Buenos Aires.
Silvia "Goldy" Legrand, hermana gemela de Mirtha Legrand murió este viernes 1 de mayo a la edad de 93 años.
Una de las últimas apariciones públicas de Silvia Legrand fue en enero de este año, cuando asistió a un evento junto a La Chiqui, en Mar del Plata.
Nació como María Aurelia Paula Martínez el 23 de febrero de 1927 en Villa Cañás, provincia de Santa Fe (180 kilómetros al sudoeste de Rosario), el mismo año en que se realizó la primera llamada telefónica transatlántica entre Nueva York y Londres, que Charles Lindbergh concretó el primer vuelo transoceánico de la historia, y que se estrenó el primer film sonoro, “El Cantor de Jazz”.
Fue hija de padres nacidos en España, él comerciante y ella maestra, y tuvo además un hermano mayor, José Antonio, quien fue director de cine, ya fallecido. Muy pronto la madre se mudó a Rosario para que los tres hermanos siguieran sus estudios allí, y que las hermanas pudieran tomar clases de actuación, canto, piano, zapateo americano y danzas. El padre, mientras tanto, atendía su comercio en Villa Cañás y viajaba los fines de semana para reunirse con ellos.
Tras la muerte del padre cuando Silvia tenía 11 años, la familia decidió radicarse en Buenos Aires, donde la actriz fue elegida, dos años más tarde, como la “Reina del Corso de la Avenida de Mayo”, una distinción tan importante en ese entonces que el premio era entregado por el mismísimo Presidente de la Nación. Eso le permitió obtener su primer trabajo como extra, junto con su hermana Mirtha (ganadora del Corso del año anterior), en la película “Hay que educar a Niní”, con la estrella de ese momento, Niní Marshall, y dirigida por Luis César Amadori.
Si bien su hermana alcanzó la fama primero, gracias a su protagónico en el film “Los martes, orquídeas” (YouTube), junto al actor Juan Carlos Thorry, Goldy también se convirtió muy rápido en una estrella con varias películas destacadas como “La casa de los cuervos”, “Claro de luna”, “Siete mujeres”, y varias más.
Sin embargo, a diferencia de Mirtha, Silvia decidió suspender su ascendente carrera en 1944, luego de casarse con el amor de su vida, el militar Eduardo Lópina (fallecido en 2005), para dedicarse luego a la crianza de sus dos hijas, Gloria y Mónica.