La exmandataria, actualmente con prisión domiciliaria, afirmó que el ataque ruso tiene un carácter “defensivo” frente al avance de la OTAN y cuestionó la mirada occidental sobre la guerra.
En medio de las negociaciones de Donald Trump para terminar con la guerra de Rusia y Ucrania, la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner realizó una fuerte defensa de lo hecho por Vladimir Putin y aseguró que el presidente ruso “nunca quiso invadir Europa”, sino todo lo contrario: defenderse ante el avance de la OTAN.
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Las declaraciones de Cristina, que se encuentra cumpliendo su condena por corrupción en la causa Vialidad en prisión domiciliaria en su departamento de San José 1111, figuran en el prólogo del libro "Proscripta y sublevada" de los periodistas Roberto Caballero y Cynthia Ottaviano (exfuncionaria K), que salió a la venta a fines de noviembre.
"Rusia es acusada por los países de la Unión Europea de querer apropiarse de toda Europa. Es común leer (aunque sea casi un oxímoron militar) que ‘Putin quiere llegar a Lisboa’, sin reparar en el carácter defensivo del ataque ruso (desde su óptica e historia), frente al incumplimiento de los tratados de Minsk sobre las regiones separatistas de Donetsk y Lugansk y al avance de la OTAN sobre la frontera rusa, ante la solicitud de Ucrania de parte de la coalición internacional", dice la exvicepresidenta.
Según CFK, "Rusia, en su larga historia, fue agredida e invadida en dos oportunidades por países europeos"; por esa razón, afirma que "Rusia nunca quiso invadir Europa, sino que históricamente ha sido al revés y por lo tanto a nadie debería sorprender la reacción rusa ante el avance de la OTAN sobre sus fronteras".
Aunque sus palabras, leídas en el contexto actual se lean como un claro apoyo a la estrategia de Vladimir Putin (que en febrero de 2022 tomó la decisión de invadir Rusia desatando un conflicto bélico que aún no encuentra resolución y ya acumula más de 200 mil muerto y 800 mil heridos, sin contar las ciudades devastadas), Cristina aseguró que de no está del lado del líder ruso.
"No va a faltar el mediocre que, al leer estas líneas, piensa que estoy de acuerdo con la guerra o defendiendo la postura de Rusia. Nada más alejado de la realidad. De hecho, en el año 2014, durante mi segundo mandato como Presidenta, y cuando Argentina formaba parte del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, por expresa instrucción nuestra, Argentina votó en contra de la anexión de la Península de Crimea efectuada por Rusia ese año”, aclaró la dos veces expresidenta.
Y agregó: “Lo hicimos en defensa del Principio de Integridad Territorial que sostiene nuestro reclamo en Malvinas".
Además, fiel a su estilo, Cristina Kirchner aprovechó la ocasión para criticar al actual Canciller Pablo Quirno. Dijo que cuando "hace unos días, el canciller de Milei Pablo Quirno, fue confundido en redes con el viceministro de economía José Luis Daza, de nacionalidad chilena; quiso hacerse el patriota y recordó que es argentino y que tiene línea de ascendencia hasta ‘antes de la independencia inclusive… Acta del Cabildo de Mayo de 1810’”.
“Eso es tan cierto como que, según dicha Acta, el antepasado del canciller de Milei, Norberto de Quirno Echandía, en mayo de 1810 votó… ¡por la continuidad del Virrey Baltasar Hidalgo de Cisneros, representante de la corona española en el Virreinato del Río de la Plata! En fin… La genética es la genética", se despachó en el prólogo titulado “El futuro tiene historia”, de la obra editada que Aleph Libros.