El Colchonero se impuso por 3-0 como visitante en el marco de la fecha 17 de LaLiga.
Atlético de Madrid cerró el año de la mejor manera al golear 3-0 a Girona en Montilivi, resultado que significó su cuarta victoria consecutiva en todas las competiciones y lo mantiene firme en el podio de La Liga.
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El equipo dirigido por Diego Simeone aprovechó la fragilidad de un rival comprometido con la pelea por no descender y golpeó rápido gracias a un golazo de Koke. El capitán capturó un balón suelto de frente al arco, apenas fuera del área, y sacó un derechazo preciso para abrir el marcador y alcanzar su gol número 50 con la camiseta rojiblanca.
La ventaja le dio control al conjunto madrileño, aunque Jan Oblak fue determinante para sostener el cero con una atajada notable ante Axel Witsel, evitando la clásica ley del ex. Antes del descanso, la mala noticia fue la salida por lesión de Nico González, pero su reemplazante terminó siendo clave.
El ingreso de Conor Gallagher tuvo efecto inmediato. El mediocampista inglés marcó uno de los primeros balones que tocó, con una definición desde la puerta del área que se desvió levemente y descolocó al arquero Gazzaniga, estirando la diferencia antes del entretiempo.
Ya en tiempo adicionado del segundo tiempo, apareció Antoine Griezmann para poner cifras definitivas y sellar el 3-0, coronando una actuación sólida y efectiva del Atlético.
Más allá del triunfo, la jornada tuvo un valor simbólico para Koke, quien alcanzó los 50 goles en 708 partidos con el club. De esta manera, el capitán se sumó a una lista selecta de volantes históricos del Atlético de Madrid que lograron esa cifra, como Luis Aragonés y Joaquín Peiró.
Cerca de cumplir 34 años, Koke continúa agrandando su legado en la institución y siendo una pieza clave en un Atlético que cerró el año con confianza y protagonismo en el campeonato español.