En el peor momento futbolístico de los últimos años, el club comunicó una nueva etapa de trabajos en la zona externa del estadio. Los arreglos incluyen accesos, ascensores, estacionamientos y un patio de comidas.
Boca atraviesa una profunda crisis futbolística: acumula 11 partidos sin ganar, la continuidad de Miguel Ángel Russo pende de un hilo y la posible reestructuración del Consejo de Fútbol genera incertidumbre. Sin embargo, en medio de este panorama, el club sorprendió al anunciar más reformas en La Bombonera, en lo que sería la última etapa antes del esperado proyecto de ampliación del estadio.
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Las nuevas mejoras alcanzan a la zona externa del Alberto J. Armando. En las próximas semanas se renovará completamente el portón de ingreso para micros, se agrandará la entrada principal de Brandsen 805 y se colocará una pantalla LED en ese sector. Además, en la zona de las vías, sobre calle Irala, se construirán 16 ascensores nuevos para facilitar el acceso a plateas media y alta, y los dos ya existentes en Puerta 18 se duplicarán.
En la platea baja, se abrirá un nuevo patio de comidas, con nuevos baños y un pasillo de ingreso más amplio, que estará listo entre septiembre y octubre. También se techará el playón de estacionamiento, se sumarán 400 espacios y se instalaron 200 reflectores nuevos tras el hormigonado de la superficie, que antes era de tierra.
Otro anuncio destacado es la alianza con Hard Rock, con quienes Boca abrirá un restaurante en el estadio a principios de 2026, de cara al Mundial de Clubes. En paralelo, se iniciarán obras en el predio de Ezeiza, donde se construirán dos canchas de césped sintético, una de ellas techada y exclusiva para divisiones inferiores. Además, Juan Román Riquelme tiene como objetivo levantar un hotel para el plantel de Primera y Reserva.
Desde la dirigencia explican que esta serie de reformas apuntan a mejorar la experiencia de los socios mientras se avanza con los estudios previos para la remodelación interna del estadio. Por ahora, no hay detalles oficiales sobre cómo será la ampliación ni cuándo comenzará, pero el reclamo por más capacidad es un clamor constante en el mundo Boca.