Los hermanos Philippou aparcan su vertiente más lúdica para proponer una de las películas de terror más duras sobre la pérdida que se recuerdan, y que trata de una mujer en duelo que acoge a dos hermanos que han perdido a su padre.
Por Desirée de Fez
Para Fotogramas
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Hay un cine de terror que prueba estrategias para inquietar y perturbar al espectador. Y hay un cine de terror que busca una conexión directa entre las emociones de los personajes y el horror. En las películas de este segundo grupo no hay espacio para el simple juego, para la búsqueda de una respuesta epidérmica y efímera en el espectador a través de situaciones e imágenes de espanto. Son films en los que hay una conexión directa entre esas imágenes y los miedos, los traumas y el tormento de los personajes. Es un cine de terror que se distingue por su gravedad y por el poso y la desolación que deja en el espectador. Es el caso de 'Amenaza en la sombra' (1973) o 'Hereditary' (2018). Y también el de 'Devuélvemela', segundo film de dos cineastas que, curiosamente, hasta ahora habían llevado al límite la idea del juego (a través de la hipérbole, lo abrupto, lo improbable) en sus vídeos en YouTube y en su magnífica 'Háblame' (2022).
En 'Devuélvemela', sobre una mujer en duelo que acoge a dos hermanos que han perdido a su padre, también está esa hipérbole: es una propuesta excesiva, que no da tregua ni a los personajes ni al espectador. Está todo el rato arriba en el ritmo (es ansiosa), en el código de las interpretaciones y en la concepción de escenas e imágenes de terror. Pocos cineastas actuales son tan radicales en la expresión del horror a través del cuerpo agredido. O tan interesantes en su manera de incorporar imágenes de espanto que pertenecen a otros lugares y lenguajes.
Sin embargo, en su segundo largo, los Philippou aparcan su vertiente más lúdica para proponer una de las películas de terror más duras sobre la pérdida que se recuerdan. Filmada con estilo y coraje y llena de ideas formales e imágenes imponentes, los cineastas trabajan con virulencia un material delicado: la infancia violentada. Motivo que puede dejar fuera a algunos espectadores. Pero, aunque hay un punto de inconsciencia, es importante señalar que no lo hacen de forma deshonesta: la película va de eso y sus secuelas. Y pocas cintas transmiten con tanta contundencia una pena tan grande.
Para fans del cine de terror que refleja las emociones de sus personajes.