Los Merengues se impusieron con una goleada por 3 a 0 con un doblete de Mbappé. Con esta victoria el equipo de Xabi no le pierde pisada al Barcelona que manda en el certamen.
El Real Madrid necesitaba una reacción inmediata y la consiguió con autoridad. Tras una seguidilla de malos resultados, un presente irregular en LaLiga y algunas titularidades cuestionadas, el equipo de Xabi Alonso goleó 3-0 al Athletic Bilbao y recuperó aire en su lucha por el campeonato. La noche tuvo dueño: Kylian Mbappé, autor de dos goles y líder de un equipo que recuperó confianza en el momento justo.
El golpe llegó rápido. Apenas arrancado el partido, Mbappé apareció dentro del área para definir con calidad una jugada que nació por derecha y que terminó con un pase justo de Alexander-Arnold. Ese tanto tempranero le devolvió tranquilidad al Merengue después de tres empates consecutivos y lo metió de nuevo en ritmo ganador.
Antes del descanso llegó el segundo impacto: Camavinga cerró una acción colectiva que desbordó a toda la defensa local y puso un 2-0 que empezó a definir la historia. En el complemento, Mbappé volvió a mostrar su jerarquía con un remate desde la medialuna que estiró la ventaja y dejó sin respuestas al Athletic, completamente desbordado en su estadio.

Con este triunfo, el Real Madrid se afirma como escolta en el torneo, a solo un punto del Barcelona, y encuentra en esta victoria el envión que necesitaba para reencauzar la era Xabi Alonso.